En 2012, Big Data era una tecnología emergente y se esperaba que tardaría cinco años en convertirse en un commodity, pero ya para 2015 lo era. Hoy es un mercado maduro que muchas empresas ya establecidas y startups están aprovechando para definir nuevas oportunidades de generar valor, sostiene Carme Artigas, fundadora y CEO de Synergic Partners, una empresa dedicada a Big Data, Data Science y Data Engineering.
Artigas fue una de las expositoras durante el evento tecnológico “Pandemonio” realizado en Panamá recientemente, donde el punto central fue resaltar que la tecnología no debe verse como un gasto para los negocios, sino como “el” negocio.
Expositores de distintos países hablaron sobre la revolución tecnológica, Big Data, inteligencia artificial, automatización, qué tan predecibles son los algoritmos, la tecnología aplicada al sector logístico y otros temas.
Sin duda, la disrupción digital está impactando los negocios. Gracias a la internet y la digitalización, un sinnúmero de productos inteligentes genera servicios inteligentes basados en datos. Tendencias como Internet de las Cosas y la inteligencia artificial (IA) potencian la monetización de la información.
En ese contexto, Big Data va más allá de la tecnología; es una estrategia de negocios que permite dar un salto de lo cuantitativo a lo cualitiativo.
Toda la información que se agrega y se acumula, la geolocalización de esos datos, el procesamiento de imágenes y videos, las consultas en tiempo real y consultas avanzadas, la gestión de infraestructura, la visión de los clientes, el análisis de medios sociales y motores de recomendación, nuevas métricas y el análisis predictivo, forman parte de ese ecosistema llamado Big Data.
Para distintas organizaciones, estos elementos son de gran valor en términos de negocios y para la toma de decisiones, prevención de fraude, gestión del riesgo, seguridad digital, seguridad ambiental, e incluso para los sistemas avanzados de alertas.
No obstante, aunque a nivel tecnológico y de mercado Big Data esté consolidada, hay un gap o brecha que persiste, mencionó Artigas. Que todos entiendan su valor para generar nuevos modelos de negocio y oportunidades.
Se estima que la Internet de las Cosas, la análitica avanzada de datos, la llamada machine learning o la capacidad de algunas máquinas de “aprender” de los hábitos de sus usuarios, los asistentes virtuales para clientes, la seguridad digital y los algoritmos en los negocios, están entre las tecnologías con mayor potencial para cambiar las organizaciones en cinco años.
Ante este panorama, los gerentes deberán tener buenas habilidades al tratar con las personas, además de los conocimientos digitales o tecnológicos.




