Permítanme contarles una historia que, aunque nada tiene de fantasía, empieza como muchos cuentos de hadas lo hacen: con un huérfano.
Manito, nombre de nuestro personaje, llegó al Centro de Rescate y Rehabilitación de Fauna Silvestre –ubicado en el Gamboa Rainforest Reserve– hace apróximadamente un mes. Se había separado de su madre por motivos desconocidos y fue salvaguardado por sus primeras hadas madrinas: la policía ecológica, que al año logra rescatar alrededor de 700 animales silvestres del área este de la provincia de Panamá y de la provincia de Panamá Oeste.
Las sirenas de la patrulla sonaron como trompetas para avisar de su llegada y el equipo de trabajadores y voluntarios, liderado por el biólogo Néstor Correa, director de la Asociación Panamericana para la Conservación, salió enseguida a recibirlo.
Lejos de ser transportado en una calabaza convertida en carruaje, lo hizo envuelto en sábanas dentro de una cajeta que hizo las veces de cuna. Y estaba hambriento, algo que forma parte importante para el rescate.
Día Internacional del perezoso
“Siempre les pedimos a las personas que cuando rescaten a un perezoso lo mantengan calientito, no lo toquen mucho, porque se estresan, y no le den nada de comer. Porque si le ofrecen una leche que no es la correcta le puede ocasionar problemas estomacales y eso lo puede matar. Se utiliza leche especial [leche de cabra en polvo] y no solamente es el tema de la leche, sino saberla dar. Usted puede tratar de alimentar al animal y puede broncoaspirar. La broncoaspiración va a ocasionar una neumonía, infecciones en los pulmones y puede también resultar letal”, explica Correa.
Luego de terminar con el protocolo de traspaso del animal, lo llevó a las instalaciones para revisarlo. “Se determina su estado de salud, sino se prensa bien, si hay algún tipo de lesión. Cuando son ataques de perro, estar seguros de que no tenga heridas debido al ataque. Si se cae, que no haya fractura; que no tenga lesiones en las patas por arrastrarse”.
Cabía casi en su totalidad dentro de la mano de Correa. Manito tendría aproximadamente mes y medio de vida, era un bebé al que aún le faltaban casi dos años al lado de su madre, como suele suceder con la especie de dos dedos a la que él pertenece. “Los perezosos de dos dedos tienen un tiempo de gestación de 11 meses y medio, y pasan casi dos años al lado de su madre. Mientras que la gestación de los de tres dedos es de cinco meses y medio, y pasan alrededor de seis meses con sus madres”.
En ese punto solo quedaba esperar cómo reaccionaría Manito a los cuidados y tratamiento. No se podía asegurar si sobreviviría. Solo el tiempo diría si su cuento de hadas tendría o no un final feliz.
Una nueva familia
Un mes después, gracias a los cuidados en el centro, la historia de Manito continúa. Y aunque tiene parálisis en sus patas traseras, ahora encontró una familia al lado de otros bebés perezosos que, al igual que él, fueron rescatados.
“Necesitamos voluntarios de cuatro brazos”, bromea Correa, refiriéndose a la cantidad de trabajo que conlleva cuidar a todos, incluyendo otros animales silvestres que están en las instalaciones.
Mientras una voluntaria le da leche a un grupo de perezosos bebés, Yiscel Yangüez, directora y administrativa del centro, se encarga de dos más. En la cocina se escucha el sonido del cuchillo con el que preparan los alimentos de los más grandes, mientras Roro, el perico, no para de hablar, como si estuviera dando órdenes y directrices.
Un búho y un águila se asoman silenciosos mientras los bebés, algunos en cunas hechas con canastas de paja, sujetas a troncos que simulan árboles, esperan su turno para comer, o duermen vigilados por otro ayudante: Fútbol.
“Fútbol es un perezoso macho adulto de tres dedos. Fue atacado por unos niños que lo golpearon, y una vecina lo rescató”, expresa Correa. Detalla que debido a los golpes que recibió en la zona lumbar estuvo por algún tiempo completamente paralizado, pero con los cuidados que le dieron se ha recuperado casi en su totalidad. No puede utilizar bien su pata derecha, lo que hace que a veces se caiga de los troncos, y casi imposibilita su liberación.
“Puede que nunca se recupere, y posiblemente se quede aquí toda la vida, pero ha resultado que se lleva bien con los bebés, así que ahora lo tenemos de niñero”, comenta Correa, mientras Fútbol mira con atención, como buen cuidador, cómo alimentan a los bebés.
Como Fútbol, hay otros perezosos discapacitados en el centro, que no podrán volver a los bosques. Mandy se electrocutó cuando era bebé y perdió una extremidad y parte de la mandíbula, mientras que Naos, nació con una discapacidad en sus patas. Ahora, no solo pasan sus días juntas, sino que cumplen labores como embajadoras: representan a su especie para educar y crear conciencia a las personas sobre la necesidad de proteger y cuidar a los perezosos.
“Aun cuando los perezosos no están en peligro de extinción, están muy amenazados por el crecimiento urbano y se ve mucho en el número de perezosos que llega al centro. Cada año recibimos unos 400 animales y de esos más de 100 son perezosos. La meta es [tratar de] no llegar a números rojos, aunque a nivel regional el perezoso tres dedos pasó a casi amenazados”, advirtió.
El proceso
El camino de los bebés que llegan al centro no se detiene allí. Los principales pilares del centro son el rescate, la rehabilitación y la liberación. Una vez cumplan los seis meses y sean juveniles, irán al Santuario de Perezosos ubicado en el Gamboa Rainforest Reserve, donde harán ejercicios de movilización, aprenderán a buscar sus alimentos solos y los visitantes podrán verlos.
Luego pasarán a un pequeño hábitat de adaptación que están construyendo y que simula un bosque, para que aprendan a sobrevivir por sí mismos. Por último, podrían ser liberados de forma monitoreada.
El centro está recolectando fondos para terminar la construcción y comprar equipo de vigilancia. De esa forma obtendrán datos como: a qué edad es prudente liberarlos, dónde se pueden hacer las reubicaciones y si realmente son favorables para los animales.
“La campaña consiste en recaudar fondos para cubrir los gastos de construcción de un hábitat de adaptación, el hábitat de reintroducción ya está construido y, recientemente, con los fondos que conseguimos con la primera fase de la campaña, compramos los equipos de telemetría. Vamos a estar utilizando collares deVHF en frecuencia 1 64 megahertz para poner a los perezosos en el recinto de reintroducción, para monitorearlos por un periodo de 12 a 18 meses. La intención es [medir] el éxito del proyecto, y el éxito de la supervivencia, tomando en cuenta que son animales que han sido criados por personas”, apuntó Correa.
¿Pueden ser liberados todos los perezosos? El especialista aclara que depende del caso de cada animal, como los que tienen problemas a causa de endogamia (cruce de la misma línea sanguínea), los cuales no serán liberados para no deteriorar la genética del animal que está en zona de bosque, y otros que tienen lesiones o problemas gastrointestinales.
Luego están los perezosos que son candidatos pero tienen que ser lo suficientemente agresivos para defenderse en el bosque y saber buscar su alimento. “Eso se puede intentar con todos los perezosos, pero los collares de rastreo nos van a decir si ellos van o no a sobrevivir. Lo que queremos asegurarnos es que no estamos reintroduciendo un animal que va a pasar trabajo y que al final va a morir, que es lo último que quieres. Queremos asegurarnos que sobrevivan, porque si sobreviven, el objetivo principal es que se reproduzcan. De nada sirve que rehabilitemos un perezoso y lo reubiquemos, si no llega a aparearse”.
El festival
Como una forma de recaudar fondos para seguir con su trabajo de rescate, rehabilitación y liberación de esta especie, el Centro de Rescate y Rehabilitación de Fauna Silvestre organiza, a propósito del Día Internacional del Perezoso, un festival, que se celebrará este 20 de octubre en el Santuario de Perezosos del Gamboa Rainforest Reserve, de 10:00 a.m. a 3:00 p.m.
Es un evento familiar que contará con la participación de organizaciones como la Policía Ecológica, la Autoridad del Canal de Panamá, el Panama Rainforest Discovery Center, el Parque Metropolitano, el Ministerio de Ambiente, la Fundación Earth Train, FAS Panamá, Yaguará Panamá y Busch Gardens, de Tampa, Florida, como patrocinador especial.
Curiosidades de los perezosos
Velocidad: En tierra, los perezosos se mueven 4 metros por minuto. Un caracol de jardín, por ejemplo, se mueve a 1.7 metros por minuto, y una tortuga Galápagos lo hace a 5 metros por minuto.
Cabeza: Con hasta nueve vértebras en el cuello, la cabeza del perezoso de tres dedos puede girar hasta 270 grados.
Sueño: Los perezosos duermen por lo general acurrucados en forma de una bola o guindando de sus garras. Duermen hasta 18 horas, y pasan el resto del tiempo comiendo.