Diego Rivera y Pablo Picasso son más cercanos de lo que muchos imaginan. De hecho, fueron amigos hace más de un siglo en París, y como suele pasar con dos grandes talentos, terminaron por enemistarse.
El museo del Palacio de Bellas Artes en la ciudad de México y el Museo de Arte del Condado de Los Ángeles (Lacma) los han reunido en dos ciudades, con una exposición que muestra los puntos de coincidencia de estos grandes pintores del siglo XX.
“Las primeras pláticas sobre esta exposición se hicieron hace unos siete u ocho años, y se requirieron unos tres años y medio de trabajo duro”, dijo el director general del Lacma, Michael Govan, durante el recorrido para prensa por la muestra.
También estuvieron presentes Lidia Camacho, directora general del Instituto Nacional de Bellas Artes; Laurent Le Bon, director del Museo Nacional Picasso de París; Miguel Fernández Félix, director del Museo del Palacio de Bellas Artes, y los curadores Diana Magaloni del Lacma y Juan Coronel Rivera de Bellas Artes.
Entre las obras prestadas por el museo de Los Ángeles se destacan “Retrato de Sebastián Juñer Vidal” de 1903, creada en el periodo azul de Picasso, y “Día de flores” de 1925, una de las pinturas más emblemáticas de Rivera en la que un indígena carga sobre su espalda una canasta con alcatraces.
“Es una de las pinturas más hermosas de ese periodo de Picasso y es muy rara. Definitivamente, en el continente americano hay pocas pinturas como esa”, dijo Govan.
De la pieza de Rivera, en tanto, destacó: “Hay otras pinturas con el mismo tema, pero esa es considerada una de las mejores y fue comprada en Los Ángeles en la década de 1920, cuando Rivera era un joven artista”.
La exposición incluye obras de arte clásico y prehispánico que ilustran las influencias de estos dos artistas, así como óleos y grabados que incluyen 16 aguafuertes de la serie “Suite Vollard” de Picasso, con una influencia de la antigüedad clásica y considerada una de las obras más importantes del grabado moderno.
El Lacma y Bellas Artes han colaborado antes, pero este es su exposición más importante hasta la fecha, pues también incluye piezas del Museo Picasso de París, del Instituto de Arte de Chicago, el Museo de la Orangerie y el Museo del Louvre, así como del Museo Casa Diego Rivera Guanajuato y el Museo Anahuacalli, fundado por Rivera con su colección prehispánica.