Los fanes ya están preparando las rosetas de maíz para ver la segunda temporada de Stranger Things, y de acuerdo con Millie Bobby Brown están en lo correcto.
“Les puedo prometer una cosa: ¡Les va a encantar y la van a ver en dos días!”, dijo la joven estrella de la serie de Netflix en una entrevista telefónica desde Chile, mientras participaba en la Comic-Con.
La actriz de 13 años, quien da vida a la poderosa Eleven, adelantó que la segunda temporada, que se estrena mañana viernes, será “un poco más oscura, emotiva. Nos adentramos más en los personajes”.
Sabe que los fanes de historias de ciencia ficción como Stranger Things, que en su primera temporada siguió la desaparición de un chico y la escalofriante cadena de sucesos que eso conllevó, suelen ser apasionados y exigentes.
“Es un reto que acepto”, dijo. “Para el equipo significa mucho que los fanes estén tan fascinados con la serie”.
Eleven, una niña con raros poderes que huyó de un laboratorio científico, es para Brown diferente de los chicos con los que comparte aventuras paranormales: “La gente responde mucho a este personaje... Creo que eso es lo que le gusta a la gente: ella es lo que uno ve, encarna a quien es y de dónde viene”.
Junto con el grupo de amigos que la descubre en la primera temporada, Eleven seguirá luchando por poner orden en una realidad cada vez más afectada por el “Mundo del Revés”.
“Creo que por eso a la gente le gustan los chicos en la serie, porque pueden resolver problemas”, señaló.
Brown, nacida en España de padres británicos, se mudó con su familia a Orlando, Florida (Estados Unidos), en 2011, y allí fue descubierta por una cazatalentos de la industria de Hollywood mientras tomaba clases de actuación.
