La Luna Llena de Tambores de febrero encontró a 3 mil y tanto de personas, de todas las edades y las nacionalidades, bajo el corotú de Ciudad del Saber en una cálida noche de verano de esas en que la brisa juega con el cabello de las mujeres.
La actividad, que se realiza una vez al mes de 6:00 p.m. a 9:00 p.m. en distintos lugares, es una opción placentera y gratuita para pasar un tiempo agradable con la familia y los amigos.
En la Luna Llena de Tambores del mes pasado, la sucesión de carros que buscaba entrar a Clayton se notaba a la distancia. A las 6:30 ya unas 2 mil personas, armadas de tambores y cubos de pintura, estaban todas distribuidas sobre el césped.
Bajo el corotú, en una tarima, la banda de música animaba a los espectadores. La emoción fue tanta, que cuando pasaron las 7 de la noche y se divisó la Luna redonda y naranja subiendo lentamente al firmamento, todos los presentes quedaron presos de una euforia casi colectiva. Es difícil no sentirse feliz cuando el clima favorece y la música acompaña.
Hay un momento, antes de que los presentes entren en la confianza, que solo se obtiene cuando se acepta que no hay de qué avergonzarse, en que el ritmo de los palos repicando contra los tambores es tímido. Pero en la tarima, varios jóvenes bailan una danza congo mientras el murmullo canta: “Ay, déjalo ir; ay, déjalo ir, yo me voy para Portobelo”. Así la vergüenza pronto se olvida.
Poco tiempo después, miembros del grupo La Tribu Performance irrumpen en el escenario, vestidos de novios sobre zancos. Más altos que todos los demás y con una máquina de burbujas a mano, capturan inmediatamente la atención de los más jóvenes.
Cerca algunos niños se lanzan un balón de football americano y un uruguayo conversa con un par de argentinas, mientras encuentran terreno común hablando de Suramérica y compartiendo mate. Un señor se mete en la foto que se toma un grupo de chicas y ríen hasta que se ofrece para inmortalizarles el momento desde un mejor ángulo.
Bajo el cielo abierto, solo con las estrellas a lo lejos, a nadie le preocupa su nacionalidad. La Luna se aleja en el cielo, como una cometa impulsada por mucho viento, y los acentos se mezclan como por fin aceptando lo agradable que es la mezcla de culturas que vive y crece en este pedacito de tierra que a la gente no le gusta emigrar.
La Luna Llena de Tambores de marzo será este próximo viernes 6, de 6:00 p.m. a 9:00 p.m. El evento se realizará en el anfiteatro del parque Omar. Es recomendable llevar cubos o tambores para participar.












