El crepúsculo y la aurora estival servirán de escenarios para las jornadas de Panamá Hace Yoga 2014.
El sábado, a las 4:00 p.m., en la terraza del hotel Sheraton, el evento se iniciará con una sesión de yoga nidra a cargo de Gustavo Plaza, de la Asociación Escuela de Auto Realización de Ecuador.
Esta clase, creada para instructores y personas experimentadas en la práctica del yoga, será una oportunidad para conocer las bondades de esta disciplina sobre la mente.
En una entrevista con la revista digital Yoga en Red, Plaza menciona la “comprensión de la naturaleza propia” y una “nueva visión de la vida”, como grandes aportaciones recibidas a través de esta práctica. Quizás por ello, la disciplina ha tomado mayor fuerza en América Latina, donde se ha hecho habitual la ejecución de esta especialidad en sus diversos estilos, plantea.
Halima Cuadra, miembro del colectivo Panamá Hace Yoga, asegura que en la primera versión del festival triplicaron la cantidad de asistentes. “Esperábamos recibir a unas cien personas y contabilizamos cerca de 400”, comenta la instructora, quien asegura que para la actividad de este año esperan tener una concurrencia aun mayor.
Para Cuadra, Panamá Hace Yoga aventaja a otras actividades multitudinarias similares por su oferta variada, que permite la integración de personas experimentadas e inexpertas, además del público infantil y el de los adultos mayores.
“Nuestro enfoque es más comunitario y busca que estas personas continúen haciendo yoga en sus vidas diarias”, añade.
Domingo familiar
En su segundo día, esta velada ofrecerá en las inmediaciones del Parque Natural Metropolitano un evento familiar.
A las 8:00 a.m., la jornada se iniciará con diversas clases de calentamiento que precederán las clases programadas para el resto del día, como se explica en la gráfica de esta página.
“Este año impartiremos dos clases para niños”, dice Cuadra, quien agrega que se contará con un área con actividades artísticas y lúdicas para los pequeños.
Itzel Díaz, también del colectivo organizador, detalla que este año incluirán clases de “yoga cuento”, que involucra una narrativa fantástica que explica a los chicos las distintas posturas de esta disciplina.
Igualmente habrá otras clases dedicadas más al adulto mayor, personas que sufran de poca movilidad corporal y para las mujeres embarazadas.
Los extranjeros anglohablantes también podrán participar en la jornada, que contará con un taller de vinyasa yoga impartido en inglés.
Los boletos para asistir a ambas jornadas se pueden adquirir a través de Banca en Línea del Banco General o el día del evento.
La sesión de mañana tiene un valor de 40 dólares, mientras que la jornada familiar del domingo cuesta 10 dólares. Niños y jubilados pagan 5 dólares ese día.
Para más información acceda a la página www.panamahaceyoga.com
