Todo empezó hace 8 años para Mauro Colombo, cuando este italiano llegó a Panamá y estuvo en la provincia de Chiriquí filmando el cierre de la Panamericana por parte del pueblo Ngäbe-Buglé contra el proyecto de minería en Cerro Colorado.
“Desde allí estaba intentando armar un proyecto que hablara del territorio de Panamá y de su interacción con el ser humano, gracias al gran apoyo del director panameño Abner Benaim”, quien hoy es productor de su película Tierra Adentro, que se proyectará en el marco del Festival Internacional de Cine de Panamá.
El documental Tierra Adentro se presentará el viernes 5 de abril, a las 9:00 p.m., en la sala 7, y después el sábado 6 de abril, a las 2:30 p.m., en la sala 8. Ambas en Cinépolis de Multiplaza.

Misterios
A Mauro Colombo le encantaría que el espectador “pudiera sentir el territorio, la naturaleza, como algo personal, interior y no como algo solamente externo que no es parte de nosotros”.
Un personaje de Tierra Adentro opina “que la crisis ecológica es una crisis espiritual. Pienso que me gustaría que el público reflexionara sobre este sentir. No obstante, no veo Tierra Adentro como una película medio ambiental. La selva del Darién está en riesgo, como la mayoría de la naturaleza salvaje y primaria en todo el mundo. Por eso, es importante que se ponga atención a lo que pasa en esta región, intentando leer la realidad a través de más puntos de vistas para entender y crear cambios afuera y adentro de nosotros”.
Durante un largo tiempo tuvo experiencias más profundas y cercanas con la selva istmeña. “Empecé a participar en diferentes expediciones por la selva del Darién con mi amigo Rick Morales, guía experto, y con Beatriz Schmitt, ambientalista, con quienes inicié esta investigación”.

Así inició una curiosidad intensa e íntima por este territorio. “Por trabajo y por asuntos personales me encontré con situaciones diferentes que me ayudaron a enfocar el tema de lo que estaba buscando”.
La imagen que tenía del llamado Tapón del Darién era de misterios. “Una selva primaria impenetrable y muy grande, una zona peligrosa. Durante estos años me di cuenta de que no es exactamente así. Los bosques primarios son siempre menos y mucho más amenazados, mucho más de lo que se piensa o de la imagen que nos pintan. Esa es la parte bien triste de la realidad”.
Cambió su idea de una selva amenazante a una amigable “si la conoces bien, y es hermosa. Es solo cuestión de acostumbrarse pasando tiempo adentro. Siempre hay peligro de hacerse daño a varios días del primer pueblo. La realidad de los narcos es un hecho en algunas zonas, pero hay que romper el mito del tapón del Darién como peligroso”.
No hubo mayores obstáculos para el rodaje de Tierra Adentro. “Tuvimos que cambiar de camino una vez porque era un camino de narcos y una vez hubo una cabeza de agua fuerte”.
El documental no es sobre el Darién, sino sobre su selva “a través de las diferentes percepciones de los protagonistas que viven o pasan o se encuentran en este territorio. Cada personaje tiene su peso y su historia. Mi mirada no cubre toda la profundidad de las realidades, pero intento mostrar lo que me resonó importante y simbólico y también lo que pude hacer”.
