Unas moléculas creadas en Panamá, a partir de inteligencia artificial, mostraron resultados sobresalientes al adherirse a una proteína del nuevo coronavirus y evitar que se dupliquen y produzcan daños al organismo.
El proyecto biotecnológico nació como un estudio individual del joven Juan Manuel Estevez.
Talento precoz
Con solo 16 años, el argentino Juan Manuel Estevez estudia a distancia en Harvard University y ha desarrollado varios proyectos científicos de biotecnología.
Estevez se enteró de las convocatorias que abrieron para respaldar, con fondos, aquellas propuestas científicas que aporten a la batalla contra la pandemia, y empezó a trabajar en marzo pasado sobre la base de una interrogante: ¿Qué tal si podemos generar una ‘molécula perfecta’, que se pueda adherir perfectamente para bloquear al virus para que no se extienda y termine muriendo porque no puede conseguir lo que necesita para vivir?
Entonces, Estevez, con ayuda de Matt R O’Connor y colegas de otros países, empezó a trabajar con la información médica y la de las cepas del virus y mediante inteligencia artificial elaboraron las estructuras de unas moléculas muy prometedoras: “Obtuvimos resultados sobresalientes de nuestro proyecto, hemos generado moléculas que han obtenido un puntaje de alrededor de -17 en la escala de la capacidad de unión. Cuanto más negativo, mejor. Por ejemplo, actualmente, el Instituto Nacional de Salud de Estados Unidos comenzó las pruebas clínicas de un medicamento antiviral, Remdesivir, que obtuvo un puntaje de -13 en la prueba de capacidad de unión; pudimos crear moléculas más potentes que están planificadas para convertirse en un fármaco físico que pueda aplicarse a los pacientes”, explica Estevez.
En total, unos 20 científicos se sumaron para mejorar los algoritmos de inteligencia artificial del proyecto que empezó Estevez. “Antes había que probar una y otra vez hasta llegar al resultado que obtuvimos y en ese proceso podían pasar años. Ahora, gracias a la biotecnología, podemos ahorrarnos mucho tiempo y trabajar con la certeza de que la estructura que usaremos es la mejor”, destaca.
El siguiente paso, detalla Estevez, es que un laboratorio use el modelo de las moléculas para desarrollarlas y con ellas trabajar una posible vacuna para la enfermedad que provoca el coronavirus. “Estamos a la espera de una respuesta técnica y analítica de parte del equipo de biotecnología de Indicasat AIP y científicos del Instituto Conmemorativo Gorgas de Estudios de la Salud han mostrado interés en tener una reunión virtual para conversar y ver cómo podemos colaborar”, amplía.
Los moléculas también despertaron interés en una institución científica de Barcelona, España, añade Estevez y adelanta que en mayo publicarán un artículo con todos los detalles del experimento: “La clave en la ciencia es siempre la colaboración, por eso científicos de todo el mundo están compartiendo información sobre este nuevo virus”.
Actualmente, Estevez forma parte de un curso de extensión en la Harvard University, que abarca la ingeniería bioquímica y la vida sintética, en aras de sumar experiencia para su preparación académica.
Esta nota fue modificada a la 1:20 p.m. del miércoles 29 de abril de 2020. En el texto original, se informó equivocadamente que Juan Manuel Estevez era pasante de Indicasat AIP...
