España se está preparando para reducir significativamente la distribución y venta de cubiertos, pajitas, vasos y productos de plástico de un solo uso o que contengan microplásticos, como parte del impulso del Gobierno para promover el reciclaje y reducir los residuos.
El Gobierno quiere prohibir la venta de plásticos de un solo uso a partir del 3 de julio de 2021 y prohibir la distribución gratuita de estos artículos desde principios de 2023, según un proyecto de ley distribuido a periodistas. Prevé aprobar la legislación en su reunión de gabinete semanal, antes de llevarla al Congreso para un debate completo.
El primer ministro, Pedro Sánchez, ya ha convertido la protección del medio ambiente en una pieza central de la estrategia del Gobierno, después de establecer un objetivo para que España sea neutral en carbono para 2050. El Gobierno también está presentando proyectos de ley para regular el transporte de residuos y esbozar la presión de España para un modelo económico basado en la reutilización de materiales y la eliminación de residuos.
Además de prohibir la venta de plásticos de un solo uso, el Gobierno quiere reducir gradualmente la disponibilidad de dichos productos. El uso de recipientes para comida para llevar o vasos para refrescos tendrá que reducirse a la mitad de los niveles de 2022 para 2026. Para 2030, el uso se reducirá en un 70%.
El proyecto de ley propone que para 2025, 77% de las botellas de plástico se deben recolectar por separado y reciclar, una proporción que debe aumentar a 90% para 2029. El gobierno quiere reducir los desechos en general en 10% este año desde los niveles de 2010, y en 15% en 2030.
“Si acumuláramos el conjunto de residuos generados en un año en España (...), nos daría para llenar 2 mil 900 veces el estadio Santiago Bernabéu” del Real Madrid, indicó en rueda de prensa tras el Consejo de Ministros la ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera. Se llenarían 45 Bernabéus solo con “envases de plástico de nuestros hogares”, dijo la ministra del gobierno de izquierda.