Aunque los bloques 5 y 6, que abarcan los rubros de entretenimiento y esparcimiento, no tienen una fecha para su vuelta tras el cierre por la pandemia, organizaciones como Open Arts y el Ministerio de Cultura (MiCultura) hacen un llamado a los artistas y gestores culturales del país a participar de la creación de unas guías para la elaboración de los protocolos de salud y seguridad ocupacional, para estar preparados cuando llegue la reapertura.
Estos planes de funcionamiento, que cada organización deberá presentar a las autoridades cuando llegue el momento, incluyen el procedimiento para detectar oportunamente a trabajadores contagiados con el SARS-CoV-2, comunicación y capacitación de los trabajadores en hábitos de higiene, implementación y actualización de protocolos para mantener la higiene y divulgación y colocación de material alusivo a las medidas de limpieza, entre otros puntos.
La discusión y elaboración de las guías “no son para atemorizar, sino para informar”, comentó Geasmine Quesada ingeniera civil de MiCultura, durante el reciente conversatorio “Reapertura en la cultura, implicaciones y perspectivas” con Open Arts.
Explicó que cada organización o persona dedicada a la cultura, deberá cumplir con medidas que garanticen la seguridad tanto a los colaboradores como a los clientes/espectadores, y que estas normas se adaptarán a cada caso particular.
Las guías que actualmente se discuten, serán una herramienta para que los artistas puedan armar sus propios protocolos ahorrando tiempo, dinero e investigación. Por ello, las guías estarán especializadas por áreas (cineastas, teatristas, etc.). “Nuestro sector tiene mucha informalidad, pero el hecho de que yo no esté formalizado, que no tenga una razón social o que, por ejemplo, seamos un grupo musical de cinco integrantes y nos reunimos tres veces a la semana para ensayar, eso no me quita la responsabilidad de contar con medidas de seguridad. Y también, cuando llegó al lugar donde me contrataron, ese sitio tiene que tener un protocolo de bioseguridad y yo me tengo que acoger a lo que diga”, explicó la especialista.
El objetivo final de los protocolos es garantizar la seguridad al público o clientes. “Que la gente vea que estamos haciendo todo bien. Que las áreas se limpian, que tengan la seguridad, que no va estar contaminado”, dijo Quesada y añadió: “No es abrir por abrir, es abrir con la seguridad y garantizar a los clientes que las industrias creativas tendrán herramientas básicas para mantener su seguridad. Porque de nada sirve abrir y al mes tener que cerrar”.
Trabajo de las guías
Las guías están en proceso de creación, con la participación de actores culturales del país y tomando referencias de entidades como la Organización Mundial de la Salud o la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura. Empresas o particulares interesados en participar en la generación de las normas, solo deben ingresar al sitio web bit.ly/bioseguridadcultura en el que se detallan los avances de la discusión del documento. Para ser parte del proceso hay que llenar un formulario y exponer las contribuciones.
En el documento base de las guías se exponen, por ahora, cuatro dominios en los que debe trabajarse, cada uno con sus particularidades y sus necesidades: lineamientos para la sede de los eventos, para los trabajadores culturales, los relativos a la actividad cultural y los vinculados con el público.
Cuando se terminen de armar, las guías se presentarán ante el Ministerio de Salud y Ministerio de Trabajo y Desarrollo Laboral para ser revisados, y una vez sean aprobadas, se publicarán en el sitio web de MiCultura para que los gestores de las artes puedan elaborar sus respectivos protocolos.