Muerte en el set dispara las alarmas

Muerte en el set dispara las alarmas
Los expertos aseguran que la seguridad es importante a la hora de manejar armas de fogueo con fines cinematográficos. AFP


La trágica muerte el pasado jueves de la directora de fotografía Halyna Hutchins a manos del actor Alec Baldwin -quien manejaba un arma con el propósito de accionarla en el transcurso de la película Rust- abrió un debate sobre la seguridad en el uso de armas de utilería a la hora del rodaje de una producción audiovisual.

+info

‘Mi corazón está roto’; Baldwin y Hollywood lamentan la tragedia Llaman a prohibir armas de fuego en sets de cine tras tiroteo de Alec BaldwinActor Alec Baldwin disparó arma de utilería que mató a una mujer durante rodaje de ‘Rust’

A medida que pasan los días se saben más detalles sobre este incidente, que también dejó herido al director de cine Joel Souza, quien estaba de pie detrás de Hutchins cuando se disparó el arma y fue impactado en el hombro.

“Se escuchó algo que sonó como un látigo y luego un fuerte estallido”, dice Souza, según un informe policial citado por la agencia de noticias AFP. Era el momento en que Baldwin se encontraba ensayando una escena y apuntaba con la pistola al lente de una cámara. Intentaba explicar cómo iba a sacar el arma y dónde estaría su brazo cuando desenfundara el arma, según explicó Reid Russell, camarógrafo que estaba esta parado al lado de Souza.

Según ese informe, el asistente de dirección Dave Halls declaró que el arma estaba “fría”, es decir, que supuestamente no estaba cargada de munición real y se podía usar. Souza, sin embargo, aseguró que no estaba tan seguro de que el arma hubiese sido revisada nuevamente tras un receso para almorzar del equipo de realización de este western de bajo presupuesto.

De acuerdo a Souza, habían dos personas que manejaron el arma. La primera de ellas es la armera de cine Hannah Gutiérrez Reed, de 24 años, quien preparó el arma y la colocó en un carro junto con otras dos armas. Tras el incidente del fatal disparo, decidió resguardar la pistola, recoger las municiones y entregárselas a las autoridades.

Mientras que la segunda persona en poseer dicha arma fue Halls, quien alegó desconocer que esa arma tenía munición real. Pero las acusaciones sugieren que este asistente de cine no era precavido a la hora de manejar la utilería de este tipo.

La fabricante de utilería y pirotécnica Maggie Goll aseguró a la cadena estadounidense NBC que Halls no tenía como prioridad el mantener un ambiente seguro en relación con el uso adecuado de las armas de utilería dentro de un estudio cinematográfico, lo cual empeoraría las circunstancias ante una posible emergencia.

“No habían rutas seguras de salida ante una eventual emergencia, no habían ni siquiera distancias seguras en torno a los disparos de armas de utilería. Estas cosas son sumamente básicas en cuánto a la seguridad”, dijo.

Este elemento contrasta con lo que dijo el experto en armas de utilería Larry Zanoff en la cadena CBS: que estas armas suelen contener balas de fogueo con polvo, pero en ningún caso deberían tener munición real. Además, no se puede estar a 20 pies del actor o cualquier otro miembro del equipo que esté utilizando el arma.

Goll -quien trabajó anteriormente con Halls en el estudio Blumhouse Productions- elevó estas quejas a los productores mientras que, por su parte, Blumhouse Productions negó haber recibido queja alguna en relación a la falta de protocolos de seguridad en este tipo de escenas.

Mientras que una fuente dijo a NBC que esta empresa sí recibió dicha inquietud en abril de 2019 por “falta de espacio personal” -ello en relación al uso de armas de utilería- por lo que Halls nunca fue llamado para participar nuevamente en algún proyecto de esta casa cinematográfica.

“Denunciar esto puede costar mi carrera, pero tenemos que alzar la voz”, manifestó Goll, entre sollozos a la citada cadena televisiva.

Rust Movie Productions -la productora de Rust- sin embargo, aseguró que “la seguridad de nuestro elenco y el equipo es la máxima prioridad”.

Otros incidentes

No es la primera vez que se registra un incidente de estas características en la industria del cine. El actor Brandon Lee falleció en 1993 cuando filmaba The Crow, al ser impactado accidentalmente por Michael Massee mientras probaba el arma, en tanto que el intérprete Jon Erik-Hexum murió en 1984 al dispararse accidentalmente en el cráneo tras jugar la ‘ruleta rusa’ con una pistola Magnum 44, que tenía una bala de fogueo en su interior.


LAS MÁS LEÍDAS