Tras 77 días cerrado debido a la pandemia, el museo de Los Oficios de Florencia, famoso por las obras maestras de Miguel Ángel, Leonardo da Vinci y Rafael, abrió ayer con gran pompa sus puertas.
Ante el alcalde de Florencia, Dario Nardella, las dos enormes puertas de madera tallada del imponente palacio crujieron mientras se abrían.
Los primeros visitantes, tras las barreras donde habitualmente se apiñan los turistas, esperaban felices.
Entre ellos estaba William, un artista irlandés de 28 años, quien se siente un privilegiado por vivir cerca del legendario Ponte Vecchio (Puente Viejo) que atraviesa el río Arno.
“Ha sido un alivio para el estrés haber pasado dos meses encerrado en mi casa en Florencia”, confiesa.
Mientras recorre las salas casi vacías del museo, bromea: “faltan unos sillones cómodos para que podamos disfrutar aún más”, dice entre risas.
“Para mí ha sido un periodo bueno, pero para la cultura y los italianos no. Florencia necesita a los turistas que vienen de América y del resto de Europa. Ver de nuevo muchedumbres en los museos significa que la sociedad vuelve a funcionar”, estima.
A distancia, Michele Diana y Anna Gladini, dos jóvenes florentinos bien abrigados por el invierno, aplauden las medidas adoptadas para entrar.
“[...] son justas y adecuadas, las mismas que exigen en todas partes: control de temperatura, gel desinfectante, mascarilla...”, indican.

“Aprovecho porque nunca había entrado al museo”, confiesa Michele, que se dejó convencer por su amiga Anna, quien quería ver el Tondo Doni, una suntuosa obra de Miguel Ángel que representa a la Sagrada Familia.
El director del museo, el alemán Eike Schmidt, encargado de una de las más antiguas y famosas colecciones de arte del mundo, que suele recibir a casi dos millones de visitantes al año, reconoce que el cierre ha sido muy prolongado.
“¡Ya era hora! Hay que mostrar estas notables obras de arte que pertenecen a toda la humanidad”, confía.
Debido a la pandemia, el palacio del Renacimiento, construido por la familia Médici, estuvo cerrado más de dos meses. “Ha sido el cierre más largo que ha tenido desde la Segunda Guerra Mundial”, subraya ajustándose su mascarilla roja.
Schmidt, que lanzó una creativa y exitosa programación on line y en las redes sociales, está convencido de que recorrer los largos corredores con sus magníficos retratos, esculturas y estatuas es una experiencia inolvidable. “La oportunidad de ver estos trabajos en persona es simplemente única, por lo que animamos a venir a todos aquellos que lo puedan hacer”, dijo.
“En este momento, tienes que residir en Toscana, porque las fronteras entre las regiones italianas todavía están cerradas”, recuerda.
Para el primer día de apertura, además de periodistas, los visitantes eran casi todos italianos.
La Covid-19 se ha cobrado la vida de más de 83 mil personas en Italia, por lo que la apertura será gradual, primero de martes a viernes y según la curva de los contagios en Italia y Europa.
“Nuestras finanzas se vieron afectadas por la pandemia en 2020, pero recibimos fondos del gobierno para compensar los meses de cierre”, explicó el director.
La pérdida de ingresos asciende a unos 4 millones de euros (4.8 millones de dólares) por cada mes de cierre, según fuentes internas.
La decisión de abrir los museos ha sido tomada por el gobierno para que la gente común pueda disfrutar de ese patrimonio cultural con total seguridad y sin la aglomeración de turistas.
“Es un pequeño paso, una señal”, explicó al inicio de la semana el ministro de Cultura Dario Franceschini.
Además de Los Oficios de Florencia, otros museos y monumentos ha abierto sus puertas de nuevo para el público, entre ellos el parque arqueológico de Pompeya, cerca de Nápoles.