Algunos son vistosos y simpáticos. Otros son considerados repugnantes y terroríficos, plagas que afectan la salud de humanos y animales o que causan pérdidas económicas.
Lo cierto es que los insectos, por su gran variedad y adaptaciones, han sido exitosos en habitar distintos ecosistemas y establecer relaciones con otros organismos. Constituyen el grupo más diverso en la naturaleza y tienen un papel importante como indicadores biológicos, ecosistémicos y ambientales.
Muchas veces, los sistemas de cultivo devastan los hábitats naturales. Se siembran monocultivos y algunas especies de insectos aprovechan para reproducirse en altas tasas, que llegan a causar daños económicos. Se habla entonces de una plaga —un concepto antropogénico— y se pretende eliminar al organismo causante con químicos, pero esto puede ser contraproducente, pues se elimina uno y otro crea resistencia y puede tomar el rol del anterior. La rotación de cultivos e intercalarlos genera un equilibrio.
Estos son algunos aspectos que se abordaron recientemente en el Café Científico “Los insectos como indicadores de la biodiversidad y salud de los ecosistemas”, organizado por la Secretaría Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación.
El Dr. Enrique Medianero, de la maestría de Entomología de la Universidad de Panamá, mencionó que algunos insectos tienen una interacción con ciertas plantas, y si esas plantas desaparecen, estos organismos también van a desaparecer. Debido a esta relación, la diversidad de estos insectos indica si los ecosistemas son vulnerables o no a las actividades humanas o al calentamiento global.
Así, la presencia y diversidad de abejas puede indicar cómo está la salud o el estado de conservación de un bosque o de una zona particular.
Por otro lado, los insectos acuáticos pueden dar luces sobre el estado en que se encuentran los cuerpos de agua, como quebradas o ríos (por ejemplo, si hay contaminación). El Dr. Juan Bernal, profesor investigador de la Universidad Autónoma de Chiriquí, destaca que el 20% de los organismos que se usan como indicadores de la calidad del agua es macroinvertebrado.
BENEFICIOS
Hay insectos que aportan beneficios al entorno, que se traducen en bienestar para el ser humano. Las avispas controlan poblaciones de insectos que son plagas. Las abejas polinizan el 70% de las especies de plantas.
Recientemente, la esposa del vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, Karen, instaló en la residencia de gobierno una colmena de unas 15 mil abejas para llamar la atención sobre el declive en las colonias de abejas, un problema que se está viendo desde hace años en países muy industrializados.
En Estados Unidos las abejas polinizan frutas, vegetales y nueces, y agregan al menos 15 mil millones de dólares anuales de valor de cultivo al incrementar la calidad y cantidad de las cosechas, según detalló la agencia AP. Su disminución impacta negativamente la producción agrícola.
El Dr. Hermógenes Fernández, del Instituto de Investigaciones Científicas y Servicios de Alta Tecnología (Indicasat-AIP), mencionó que los agricultores del mundo están preocupados por el colapso de las abejas, que se cree es causado por una combinación de factores, entre ellos, los pesticidas y cambios en los ecosistemas.
En el futuro, ¿será una práctica común la polinización manual de cultivos? ¿Cómo impactaría los costos?
De acuerdo con el profesor Alonso Santos Murgas, del Museo de Invertebrados de la Universidad de Panamá, en las abejas de las orquídeas (Euglossinae), la diversidad y abundancia dependen de muchos factores ambientales, la altitud y la diversidad de plantas con flores.
Estas abejas tienen una fuerte presión debido a la tala, deforestación, quemas, el avance de la frontera agrícola y el cambio climático, perturbaciones que dañan sus fuentes alimenticias. Si las poblaciones de abejas de las orquídeas disminuyen, se afectará la polinización de las plantas con flores y se reducirá la diversidad de plantas en los bosques tropicales.
En un sector del Parque Nacional Darién se han hecho monitoreos para determinar la diversidad de abejas de las orquídeas. Los investigadores emplean trampas con sustancias atrayantes, como aceite de eucalipto, entre otros.
Los científicos explican que es importante conocer la diversidad de especies, sus hábitos o conducta, para fortalecer el resultado de los estudios sobre el estado de conservación de un área.
SOCIALES
Hormigas y termitas constituyen el 50% de la biomasa animal de los ecosistemas terrestres y sirven como alimento a otras especies. Las hormigas cortadoras de hojas intervienen en el ciclo de nutrientes, descomposición y movimiento del suelo para que se mantenga poroso y aireado, así como también en la dispersión de semillas, y en menor escala, en la polinización.
Un aspecto importante de estos insectos sociales es que son fuente de “baterías químicas”, como describe el Dr. Fernández, ya que tienen glándulas que secretan muchos compuestos de interés biomédico, y están asociadas a grupos de bacterias que producen antibióticos.
Además, sirven de refugio para otros organismos, como las crías de culebras o lagartijas.
Actualmente, hay grupos de investigadores que tratan de entender la función del fluido seminal cuando los machos copulan con las hembras. El interés radica en las proteínas de este fluido, que activan el sistema inmune de las hembras para erradicar infecciones.
Otra línea de investigación es cómo pueden las hembras de insectos sociales guardar y mantener vivo el esperma durante muchos años después de la cópula.