Fiscal pedirá juicio por riego de Tonosí



Luego de un año y tres meses de investigaciones, la Fiscalía Tercera Anticorrupción remitirá al Juzgado Décimo de Circuito Penal la vista fiscal con solicitud de llamamiento a juicio por la presunta comisión de peculado a los implicados en el caso por el fallido proyecto del sistema de riego de Tonosí.

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Piden nueva investigación en caso del sistema de riego de TonosíFiscalía de Cuentas investiga a 11 personas y 2 empresas por contrato del fallido proyecto de riego de Tonosí

Una fuente judicial confirmó que la fiscal Tercera Anticorrupción, Zuleyka Moore, culminó las pesquisas por las presuntas irregularidades en la adjudicación y manejo del contrato a la empresa ecuatoriana Hidalgo & Hidalgo (H&H), a la que el gobierno pasado le entregó un anticipo de 31 millones de dólares.

En septiembre de 2014, la fiscalía formuló cargos a los directivos de H&H Juan Francisco Hurtado, Marco Albán Crespo y Víctor Ríos; al exvicepresidente Felipe Pipo Virzi; a los exministros de Desarrollo Agropecuario Óscar Osorio y Emilio Kieswetter y al excandidato a diputado de Cambio Democrático Porfirio Ellis, entre otros.

Consultado sobre el tema, el titular de Desarrollo Agropecuario, Jorge Arango, expresó que corresponde al Ministerio Público y a los tribunales resolver la parte judicial, mientras que su despacho negocia con H&H “para saber cuánto dinero deben devolver”.

La Prensa tuvo acceso a parte de la auditoría que le hizo al proyecto la Contraloría General, la cual revela la magnitud de los hechos que se investigaron.  

RIEGOS DE TONOSÍ, LA HISTORIA DE UNA ESTAFA

Riegos de Tonosí, lejos de ser un proyecto que beneficiaría a miles de campesinos en la provincia de Los Santos, fue concebido por el gobierno pasado para enriquecer a un puñado de políticos y empresarios que eran parte del llamado “círculo cero” del expresidente Ricardo Martinelli, así como al propio exgobernante.

A la empresa ecuatoriana Hidalgo & Hidalgo se le adjudicó el proyecto de riego de Tonosí –por un monto de 155 millones de dólares– del que recibió un adelanto de 31 millones de dólares, pactado en el contrato. La Prensa tuvo acceso a la auditoría que le practicó la Contraloría General para saber el destino de este anticipo, y el de otros 6.1 millones de dólares por trabajos que la compañía alega haber adelantado, para un total de 36.1 millones de dólares.

Los nombres de los involucrados son ya conocidos: Felipe Pipo Virzi (exvicepresidente –1994-1999– y empresario); Riccardo Francolini (empresario y exmiembro de la junta directiva de la Caja de Ahorros); Porfirio Bolita Ellis (excandidato a diputado por Cambio Democrático); Gabriel Gaby Btesh (empresario), Ricardo Ricky Calvo (empresario y socio de Virzi) y hasta el entonces presidente, Ricardo Martinelli, así como varios otros personajes menos conocidos, pero igualmente protagonistas.

ANTECEDENTES

El proyecto de riego en Tonosí no es nuevo. Fue una idea que nació en la dictadura militar (1968-1989), pero, tras varios intentos, el plan comenzó a tomar cuerpo en la gestión de Martinelli, aunque no por iniciativa de él, sino por un “grupo de interesados”.

La Contraloría, al examinar los interrogatorios que rindieron varios acusados por este caso ante el Ministerio Público, concluyó que hubo “situaciones que incidieron directamente en la selección de la empresa contratista”. Es decir, Hidalgo & Hidalgo no ganó limpiamente la licitación, sino que necesitó y recibió ayuda, pero no gratuita, pues tuvo que pagar por ella con el anticipo de 31 millones de dólares convenientemente pactado en el contrato.

“Estos testimonios –subraya la Contraloría– dan cuenta de una serie de hechos que permiten comprender cómo, desde dos años antes de formalizarse el trámite para la contratación del citado proyecto, personas ajenas a la administración del Ministerio de Desarrollo Agropecuario [MIDA] manejaron información privilegiada que, para ese momento, solo podía ser del conocimiento de funcionarios de esa entidad”.

La “información privilegiada” es un elemento en común que describe un patrón en muchos de los contratos que firmó el gobierno de Martinelli, como los caso de compra-venta de bolsas con alimentos, comida deshidratada, escándalos vinculados a la mina de Petaquilla, y un largo etcétera.

Pipo Virzi –quien recibió unos 11.2 millones de dólares de los 31 millones adelantados a Hidalgo & Hidalgo– (incluidos dos pagos de 50 mil dólares cada uno y 890 mil dólares más depositados en la cuenta bancaria de la sociedad Summer Ventures, en marzo de 2014), admitió irregularidades en el manejo de la licitación.

Una grave, sin duda, es la existencia de un contrato de “prestación de servicios profesionales”, suscrito el 12 de octubre de 2010 –dos años antes de la licitación– entre el abogado Luis Vargas Davis y el apoderado de Hidalgo & Hidalgo en Panamá, Marco Albán Crespo (detenido en esta capital a mediados de este año, poco antes de abordar un avión).

Vargas Davis, aunque firmó el contrato, lo hizo en representación de Virzi, según él mismo declaró a los fiscales. El documento básicamente establecía que Hidalgo & Hidalgo, si ganaba el contrato, debía pagarle a Virzi una “comisión” del 10% del monto total del contrato, lo cual suponía que el empresario obtendría 15.5 millones de dólares sin casi haber movido un dedo, pues el mismo Virzi reconoció no tener vinculación alguna con Hidalgo & Hidalgo, ni siquiera conocía sus oficinas. Su tarea fue asesorar, “…poniendo yo [Virzi] mi nombre…”. Y eso fue todo.

REDONDEANDO EL NEGOCIO

Virzi, que en sus primeras declaraciones fue ambigüo, fue al Ministerio Público para ampliarlas, pues, en sus propias palabras, “nunca pensé que quedaría en esta situación y no estaba preparado […por eso] voy a explicar cómo entro yo al proyecto”.

Lo primero que hizo fue mencionar a Porfirio Bolita Ellis, un político de bajo perfil de Cambio Democrático (CD) al momento de comenzar las negociaciones del proyecto de riego. Al igual que el representante legal de Hidalgo & Hidalgo, fue detenido en Tocumen a punto de abandonar el país.

Ellis es descrito por Virzi como un conocido suyo “de toda la vida”. Los negocios de Ellis son más públicos en Veraguas –donde posee establos, fincas, sementales equinos y hasta pista de lazo–, pero sus inversiones en Panamá son poco conocidas, vinculadas al sector inmobiliario, con otros empresarios.

Virzi describió a Ellis como “medio asesor del presidente Ricardo Martinelli […] se encargaba de inscribir a las personas en el partido [CD], tenía un poder enorme”.

‘LO QUE SOBRA ES PLATA’

Convencido de las “bondades” del proyecto –entre las que sin duda figuraba su “comisión” del 10% de su costo– Virzi explicó a los fiscales que para ejecutar esta obra acudió al amigo que le había prestado plata durante la invasión de Estados Unidos en 1989 y quien aún estaba muy agradecido con él por haberlo sacado de aquel hueco: Ricardo Martinelli, por entonces presidente de la República. Virzi, según dijo, definió el proyecto como “importante”, “maravilloso”, “indispensable”, “beneficioso”.

La conversación con Martinelli, según Virzi, giró en torno “al interés que yo tenía para que se realizara el proyecto […]; que yo tenía la empresa No. 1 en Ecuador…” para hacer el proyecto. Martinelli –contó Virzi– reaccionó entusiasmado, que había que hacer la obra, “que tenía la plata para eso y para más, porque lo que sobraba era plata”.

Con este cabo amarrado, Virzi describió entonces el trabajo que hizo su abogado Luis Vargas Davis para que lo representara a él en las negociaciones con Hidalgo & Hidalgo, a fin de obtener su “comisión”.

Los elogios de Virzi a Vargas Davis fueron elocuentes: su trabajo fue “profesional y beneficioso para mí”. En efecto, el negocio le representaría a Virzi 15.5 millones de dólares –10% de “comisión”– y lo único que tuvo que hacer fue “conseguir el contrato [para Hidalgo & Hidalgo]”.

Y eso quedó amarrado tras hablar con Martinelli. “Ya eso estaba cuadrado, yo solo fui a buscar la bendición”, refiriéndose al entonces presidente, aunque desligando a los extitulares del Ministerio de Desarrollo Agropecuario (MIDA) Emilio Kieswetter y Óscar Osorio, de quienes dijo desconocían la situación, aunque eso está en tela de duda, como se verá más adelante, al menos en un caso.

 Y LLEGAN LOS MILLONES

Cumplido este “primer objetivo” de “ganar” la licitación, explicó el exvicepresidente a los fiscales, el Estado pagó un primer anticipo a Hidalgo & Hidalgo, en julio de 2012, de 15 millones de dólares, de los cuales 5.2 millones de dólares fueron a dar a una cuenta de Virzi en su banco, el Universal.

Sin embargo, en su declaración, Virzi hizo todo lo posible por desligarse de ese dinero: “Inmediatamente después empieza a darme instrucciones el presidente Ricardo Martinelli, de cómo debo distribuir mi pago; yo me molesto por un lado, y le reclamé, pero si no seguía las instrucciones, podría afectar mis empresas y proyectos y hasta mis relaciones con él”.

En cambio Virzi responsabilizó a su socio, su mano derecha y amigo íntimo Ricardo Ricky Calvo –quien sí logró salir del país oportunamente– de repartir el dinero, depositado en una cuenta en el Banco Universal, a nombre de la sociedad Summer Venture, en la que Virzi era firmante. Pero, Virzi alegó que “nunca he firmado ni he ordenado instrucciones de esa cuenta”. Los titulares de esa cuenta –añadió– eran Calvo y su madre, Magdalena Latorraca de Calvo.

“En el segundo pago me hacen una transferencia [de 5 millones de dólares] e inmediatamente empieza la presión para que se hiciera la distribución, para lo cual, Ricardo Calvo me trae escrita las instrucciones bancarias para que las firmara. [Entonces] me percato de que mi trabajo por lograrlo [el contrato] que yo hice, no me queda nada y que no podía hacer nada”, narró Virzi.

El empresario aseguró no saber con precisión cuánto dinero recibió por su “trabajo”, pero sus cálculos lo sitúan en unos 500 mil dólares, cifra que contrasta con los 5 millones de dólares que devolvió al Estado, tras su arresto domiciliario. Dado lo insignificante de lo que recibió respecto a sus expectativas, dijo a los fiscales que el tema lo tenía ofendido y por ello “le dije [presuntamente a Martinelli] te quedaste con la limosna, la alcancía y el santo…”.

PROBLEMAS

El contrato privado de prestación de servicios profesionales –es decir, el contrato de la “comisión– firmado por el abogado Vargas Davis (en representación de Virzi) e Hidalgo & Hidalgo tuvo un serio problema. Y es que Hidalgo & Hidalgo tenía que justificar ante el fisco el pago de esas “comisiones”. Vargas Davis aceptó firmar a título personal el contrato, por lo que no había una empresa o sociedad a quien pagarle, sino directamente a Virzi.

Quizás esa fue la razón por la que Vargas Davis explicó al Ministerio Público que Bolita Ellis le presentó documentos en 2012 en los que le solicitaba ceder el contrato de las comisiones a favor de una sociedad llamada Agro Energía Internacional, S.A.

Cuando Vargas Davis le preguntó a Ellis la razón de esa cesión, este le dijo que Hidalgo & Hidalgo le estaba solicitando facturas fiscales por los trabajos realizados. Y a pesar de que Vargas Davis firmó la cesión, la operación finalmente no se perfeccionó por oposición de Hidalgo & Hidalgo, aunque en los libros de la empresa ecuatoriana, el pago del dinero a Virzi fue facturado a la sociedad Agro Energía Internacional.

Vargas Davis le cobró a Virzi por sus servicios –a través de la sociedad Estilo 747, S.A.– 180 mil dólares, esto es, por confeccionar un contrato de cuatro páginas a favor de Virzi y, especialmente, por estampar su firma en ese documento, utilizando su nombre y, en consecuencia, ocultando al verdadero beneficiario: Pipo Virzi.

Pero cuando el abogado cobró por sus honorarios (180 mil dólares), no fue Virzi el que le pagó, sino Hidalgo & Hidalgo, según él mismo reconoció.

EL INTERMEDIARIO

El papel de Bolita Ellis en el negociado del proyecto de riego del Valle de Tonosí parece clave en las investigaciones, tanto de la Contraloría General como del Ministerio Público. El político veragüense, declaró el abogado del exvicepresidente Pipo Virzi Luis Vargas Davis, estuvo presente en dos de las tres reuniones en las que se negoció el pago de las “comisiones” a Virzi.

Además, dijo que Ellis ya tenía una relación con el representante en Panamá de Hidalgo & Hidalgo, Marco Albán Crespo: “Por supuesto que sí lo conocía, de hecho fue él [Ellis] quien me presentó al señor Marco Albán y él era la persona que mantenía las relaciones con la empresa Hidalgo & Hidalgo”.

Las relaciones de Ellis se extendían al exvicepresidente Virzi, quien lo describió en sus declaraciones al Ministerio Público como una persona de “enorme poder” en el gobierno de Martinelli. Ese poder salió a flote cuando Ellis se convirtió en jefe de campaña del precandidato presidencial de CD Rómulo Roux, quien, dicho sea de paso, también es mencionado en la auditoría de la Contraloría.

La auditoría precisa que Roux recibió una donación de Hidalgo & Hidalgo –del anticipo del proyecto de riego– de 15 mil dólares, para la compra de suéteres “color turquesa, impreso con dos colores con las palabras y número ‘Vota 2”, presuntamente para su campaña por la candidatura presidencial de Cambio Democrático. (Obviamente, la Contraloría restó esta “donación” de los gastos que Hidalgo & Hidalgo atribuyó al proyecto).

La Prensa llamó al celular de Roux, pero este no respondió la llamada ni el mensaje que se le dejó.

Pero Roux no fue el único político que recibió donaciones de Hidalgo & Hidalgo. La Contraloría también restó de los gastos del proyecto un cheque por 100 mil dólares, que contablemente se registró como una “donación política” al partido Cambio Democrático, girado el 28 de abril de 2014, al final de la campaña política.

El exvicepresidente Virzi contó a los fiscales que fue Ellis el que lo invitó a sumarse al proyecto de riego, pues, en realidad, Hidalgo & Hidalgo nunca tomó contacto con él, reveló. “Ellos [los ecuatorianos] tenían conversación con Porfirio Ellis, me imagino que él fue quien dijo que yo era quien podía colaborarles”, explicó.

Según Virzi, Ellis “atinadamente sabía que yo podía hacer el proyecto, por conocer del tema, él fue quien me buscó […]. Él tenía un diseño en general de cómo iba a ser el proyecto y se decía que el Estado lo único que tenía que hacer era resolver el asunto de las tierras… De esto lo conversamos en mi pueblo, la última vez fue en [el restaurante] Manolo de Obarrio, recuerdo muy bien que después de esa conversación salí directamente para la Presidencia a hablar con el Presidente…”.

Ellis, como se ve, suma un protagonismo inédito hasta ahora. Tanto es así que el abogado de Virzi, Vargas Davis, reveló a los fiscales que el pago de las “comisiones” a Virzi “me llegaban a través del señor Porfirio Ellis”, pese a que el dinero salía de las cuentas de Hidalgo & Hidalgo.

En su declaración, el abogado dijo que Ellis le confió que “él llevaba conversaciones adelantadas para apoyar a la empresa [Hidalgo & Hidalgo] para que participara en contratos con el Gobierno, vía licitación pública, ya que la misma había participado en varias otras licitaciones sin éxito, debido a que probablemente no contaban con la experticia”, argumento que también dieron los representantes de Hidalgo & Hidalgo para justificar el pago de la “comisión” del 10% del monto del contrato a Pipo Virzi.

En efecto, el representante de Hidalgo & Hidalgo, Marco Albán Crespo, dijo a los fiscales que su empresa tenía presencia en este país desde 2008, y aunque había participado en varias licitaciones –en las que casi todo el tiempo ofrecían un mejor precio– perdían por fallas técnicas-administrativas. De ahí la necesidad de contratar a unos consultores que le cobrarían el 10% de comisión del valor del contrato, justificó.

Y así fue. Todo empezó a cambiar gracias a Ellis, quien, según Albán Crespo, le dijo que él podía ayudarlos “a través de la colaboración de un sinnúmero de profesionales en diferentes áreas para el desarrollo de las diferentes licitaciones…”.

Curiosamente, Ellis –sin ser funcionario del Estado– tenía información rica y variada de los proyectos del gobierno de Martinelli. Este político veragüense –describió Crespo Albán– no solo les habló del proyecto de riego de Tonosí en 2010, sino también le “mostró otros proyectos que estaban en la cartera del Gobierno, incluyendo la carretera de Barú, de Paso Canoas, Santiago-David”. Hidalgo & Hidalgo eligió el proyecto de riego por tener experiencia en ese ramo, dijo Albán Crespo.

El ecuatoriano añadió que Ellis, como parte de sus servicios, proporcionaría ayuda legal para la “correcta” interpretación del pliego de las licitaciones, reclamos si fueran necesarios, ayuda en la selección de personal técnico y hasta asesoría para ejecutar el contrato: permisos, aprobaciones, etc.

Así empezaron a negociar y “al final acordamos un factor [una “comisión”] del 10%, lo cual no nos parecía excesivo en función de experiencias previas en otras índoles en las que se han fijado factores parecidos…”. Esa “comisión” era de 15.5 millones de dólares.

Como se habrá podido notar, Virzi no apareció en las negociaciones con Hidalgo & Hidalgo. Su representante siempre fue Ellis, y su abogado Luis Vargas Davis.

Albán Crespo declaró que conoció al abogado Vargas Davis por intermedio de Ellis. Dijo que este se lo presentó “como un abogado de su confianza y el que sería el firmante del contrato de servicios [comisión]”.

Ellis, a su turno, guardó distancia de Hidalgo & Hidalgo ante el Ministerio Público, incluso, de Virzi. Dijo –por ejemplo– que no fue él quien contactó a Hidalgo & Hidalgo, sino que su representante (Albán Crespo) lo contactó a él para hablar del proyecto de riego de Tonosí.

OTRO ‘OFENDIDO’

Al igual que Virzi, Ellis declaró a los fiscales sentirse ofendido en este negocio. Dijo haber participado en su condición de economista y asesor, y por eso “toqué la puerta del señor Virzi, el cual es ingeniero y especialista en riego, para coadyuvar profesionalmente” con Hidalgo & Hidalgo.

Pero, como se recordará, el propio Virzi dijo que jamás había pisado las oficinas de Hidalgo & Hidalgo y mucho menos fue al campo a conocer las necesidades del proyecto. Lejos de poner en práctica sus supuestos conocimientos en riegos, Virzi solo se limitó a hablar con Martinelli sobre el proyecto, “trabajo” este por el cual pretendía 15.5 millones de dólares.

Ellis también declaró que en 2012, tras haber ayudado a la empresa a ganar la licitación del proyecto de riego de Tonosí, “se me comunica, por el señor Virzi, que ya no estábamos en el proyecto, me enojé, busqué respuestas que hasta este momento no he obtenido…”. Luego dijo que lo llamaron para que recibiera un cheque de 319 mil dólares. Explicó que en ese momento no supo su monto, aunque sin conocerlo, dijo que, por lo que “había hecho, no había sido suficiente… ni ameritaba una cuantía significativa”.

“Yo, al escuchar por teléfono esto, me siento ofendido e indignado, mi respuesta fue muy clara: que se quedaran con todo, que arriba existía un Dios...”, declaró. De hecho “perdí dinero que sé que nunca voy a recuperar”.

Pero Ellis, a pesar de negar su vinculación con el contrato de “comisión” y sus íntimas relaciones con Hidalgo & Hidalgo aún tiene mucho que explicar en este asunto.

Tres de los principales implicados en el escándalo están en su círculo de conocidos y amigos: “Conozco al señor Felipe Virzi, empresario de mi pueblo; Abdiel Atencio [director de Ingeniería Rural y Riego del MIDA y miembro de la comisión que eligió a Hidalgo & Hidalgo como ganadora de la licitación] es de mi pueblo; Óscar Osorio, lo conozco de muchos años atrás, por el tema político que nada tiene que ver en esto”.

Todos ellos tiene en común –además de su vínculo con Ellis– haber recibido dinero de fuentes relacionadas con el proyecto de riego. Por ejemplo, Abdiel Atencio, funcionario del MIDA: su hijo cambió un cheque de 20 mil dólares, dinero que salió de las cuentas de Virzi en la sociedad Summer Venture (a donde fue a dar dinero del proyecto); y Óscar Osorio, quien fuera titular del MIDA, quien recibió de Virzi un supuesto préstamo de 30 mil dólares para comprarle un carro a su hija.

“Le pregunté [a Osorio] cuánto necesitaba, me dijo que se graduaba, que se casaba [su hija], una vaina de esas, y le presté, más que un regalo, la suma de 30 mil dólares”, narró Virzi.

Ellis, además, debe explicar su vinculación a la empresa Agro Energía Internacional, S.A., compañía esta que en los libros de Hidalgo & Hidalgo aparece como un proveedor al que le adjudicaron cuentas por valor de 15.5 millones de dólares, es decir, el equivalente al 10% del valor total del contrato del proyecto de riego, valorado en unos 155 millones de dólares.

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