Representantes de la Comarca Emberá Wounaan rechazaron este jueves 5 de septiembre, las acusaciones realizadas por los efectivos del Servicio Nacional de Frontera (Senafront), sobre la conformación de campamentos clandestinos para negociar con la necesidad de los migrantes que ingresan a Panamá por la frontera con Colombia en Darién.
El cacique general de la Comarca Emberá, Leonides Cunampia, dijo en entrevista con TVN Noticias, que las autoridades del Servicio Nacional de Migración del gobierno de Laurentino Cortizo, es decir la ex directora, Samira Gozaine, tenían conocimiento pleno de las actividades de estos campamentos a los que calificó de centros de ayuda a los migrantes.
“Ese campamento no era clandestino, es un centro de ayuda [...] Totalmente tenían conocimiento los del gobierno pasado”, dijo Leonides Cunampia, al indicar que son dos campamentos que existen en el área.
“Allí no se cobra, sólo se cobra el servicio de agua que se da”, indicó Cunampia al señalar que ellos prestan ayuda tanto de comida, como de alojamiento y acceso a productos de salud.
Aseguró que en ese campamento en específico se brinda asistencia y ayuda a los migrantes. “Panamá debería estar agradecido con los pueblos indígenas, nosotros damos los primeros auxilios y hemos evitado un poco de muertes”, expresó el cacique.
El pasado 31 de agosto, Jorge Gobea, director de Senafront, anunció el hallazgo del campamento que calificaron de clandestino, ubicado entre los ríos Tacartí y Membrillo, en el sector conocido como Dos Bocas, en la provincia de Darién.
En ese momento indicaron que se trataba de un campamento al que eran guiados los migrantes por los llamados ‘coyotes’ que comercializan las rutas de migración.
Posteriormente Senafront informó que el caso ha sido pasado al Ministerio Público y se espera la orden para desmantelar y desalojar el campamento.
Cunampia admitió que en la montaña hay gente mala que se aprovecha de los migrantes, pero aseguró que en ese campamento no negociaban con las personas.
Héctor Huertas, abogado de la Comarca dijo que tanto el alcalde de la Comarca como la gobernadora solicitaron entre 2022 y 2023 a las autoridades de Migración para que se pudieran establecer estos puestos de auxilio para los migrantes.
“Consideramos que el Estado debe asumir su responsabilidad y hacer reuniones en coordinación con los Emberá y tener una ruta y un trato más humano con el tema de migrantes, porque también se escapa tanto de las acciones del Gobierno como de los indígenas”, dijo Huertas.
Expresó que no se puede desconocer que en la zona operan algunos individuos que están dedicados al tráfico de personas.
“Hay individuos, y tampoco podemos tapar el sol con una mano, que están dedicados al tráfico internacional, pero de esas personas no estamos nosotros hablando, sino de las comunidades que requieren una ayuda y comprensión de las autoridades del Estado”, sostuvo Huertas.