El Órgano Judicial suspendió la audiencia intermedia que debía celebrarse este martes, en el proceso seguido a Oydén Ortega Collado, y Claudia Purcait, hijo y exsecretaria, respectivamente, del exmagistrado de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), Oydén Ortega Durán, por la presunta comisión del delito de tráfico de influencias.
La audiencia convocada para este martes, era para validar las pruebas que se utilizarán en el juicio.
Al iniciar el acto, convocado para las 2:00 p.m., Purcait comunicó que se sentía afiebrada. Su abogada, que intervino en la audiencia a través de videoconferencia, narró que se hizo una prueba de hisopado, para determinar si tiene o no coronavirus. El resultado no se lo han entregado.
Acto seguido, el juez Justo Vargas decidió reprogramar la audiencia intermedia para el próximo 3 de septiembre.
El proceso tiene su génesis en una denuncia presentada por el empresario chiricano César Alvarado Taylor, quien acusó al hijo del exmagistrado Ortega Durán de haberle solicitado dinero a cambio de la admisión en la Corte de un recurso de casación, relacionado con un pleito por la venta de ocho fincas en 2002.
A Alvarado Taylor también se le formularon cargos, pero este martes, su abogado Carlos Augusto Herrera informó a los periodistas que su cliente había llegado a un acuerdo. Se desconocen los términos de ese arreglo, pero Herrera indicó que Alvarado Taylor continuará participando en el proceso, pero ahora como testigo de la fiscalía.
En su momento, Alvarado Taylor presentó una denuncia contra Ortega Durán ante la Asamblea Nacional, que eventualmente la archivó por supuesta falta de pruebas.
Alvarado Taylor aportó los chats de las conversaciones sostenidas con Oydén Ortega hijo, en los que este habría solicitado dinero para lograr la admisión de un recurso de casación relacionado con un proceso por la venta de ocho fincas.
Supuestamente, la estrategia -siempre según Alvarado Taylor- era que el expediente, que en un principio estaba en manos del entonces magistrado Harley James Mitchell, quedara en manos de Ortega Durán, y la intervención clave del presidente interino de la Corte, Hernán De León.
Mitchell terminó su período de 10 años en la Corte en enero de 2016, y Ortega Durán, en marzo de 2019.
Alvarado Taylor reconoció que pagó $40 mil, de los cuales $15 mil eran para la admisión del recurso de casación. También aseguró que para lograr que el fallo saliera a su favor, le estaban exigiendo $250 mil.