El procurador general de la Nación, Eduardo Ulloa, presentó su renuncia irrevocable al cargo, a casi 14 meses de haber asumido el puesto, en reemplazo de Kenia Porcell.
La carta de renuncia -efectiva a partir del 1 de marzo- fue enviada este miércoles 24 de febrero, al presidente Laurentino Cortizo.
Se desconocen las razones de esa dimisión, pero en su nota a Cortizo, Ulloa reflexiona sobre el sacrificio personal que asumió al aceptar el puesto y a tener que lidiar “con una sociedad en permanente confrontación, en donde la crítica interesada y el juzgamiento mediático deja atrás el análisis sereno y objetivo del trabajo que se realiza, lo que hace del servicio público una labor ingrata e incomprendida”.
También expresa su frustración por trabajar con un sistema “incapaz de dar solución a situaciones tan críticas como el bienestar de nuestra niñez”.
Comunicado a la Nación. pic.twitter.com/UNNyAtpb7O
— Ministerio Público (@PGN_PANAMA) February 24, 2021
De hecho, una de las intervenciones públicas de Ulloa fue el pasado 18 de febrero, cuando ofreció declaraciones sobre los procesos que se adelantan respecto a los abusos a menores de edad en albergues subsidiados por el Estado.
Ulloa tomó posesión el 2 de enero de 2020, para completar el mandato de 10 años (que vencen el 31 de diciembre de 2024) que correspondía a Porcell, quien había renunciado en medio del escándalo por la filtración de unos presuntos mensajes del expresidente Juan Carlos Varela.
Se desconoce quién ocupará el cargo que queda vacante con la partida de Ulloa.
El subprocurador es Javier Caraballo.