El juicio del caso Panama Papers entra mañana en su fase final, con el cierre de la etapa de presentación de pruebas por parte de la fiscalía y de los abogados defensores; lo siguiente sería, entonces, la fase de alegatos.
La fiscal especializada contra la Delincuencia Organizada, Isis Soto, calculó que necesita 10 horas para exponer sus alegatos y sostiene que ha mostrado pruebas suficientes que sustentan que los 29 imputados cometieron el delito de blanqueo de capitales a través de una red de sociedades offshore creada por la extinta firma forense Mossack Fonseca.
La tanda de alegatos la abrirá la fiscal Soto; luego siguen los abogados de los imputados. La juez segunda liquidadora de causas penales, Baloisa Marquínez, anunció el orden en el que los defensores presentarán sus argumentos.
La jornada de este lunes 15 de abril, sexto día de juicio, se inició con la declaración del perito forense Luis Enrique Rivera Calle, encargado de descargar la información digital contenida en los servidores de Mossack Fonseca.
📹La Fiscal Superior contra la Delincuencia Organizada, Isis Soto informa lo acontecido en el sexto día de la audiencia ordinaria por caso #PanamaPapers. 👇 pic.twitter.com/D4IhY1pegA
— Procuraduría General de la Nación (@PGN_PANAMA) April 15, 2024
Rivera Calle relató que llevó a cabo la descarga de la información con la colaboración de funcionarios del Ministerio Público, dado que se trataba de varios servidores que contenían una gran cantidad de datos, razón por la que la diligencia se extendió por varios días.
Rivera Calle recordó que la diligencia de allanamiento a los servidores de Mossack Fonseca fue ordenada por el entonces fiscal contra la delincuencia organizada Javier Caraballo (hoy procurador general de la Nación), y contó con la colaboración de funcionarios del Ministerio Público.
El perito, interrogado por el fiscal Marcos Mosquera, aseguró que durante la diligencia se cumplió con la cadena de custodia para la preservación de los datos informáticos obtenidos durante el allanamiento. Sin embargo, los abogados defensores lo cuestionaron severamente, interrogándolo sobre su capacidad y preparación para llevar a cabo la descarga de la información de los servidores.
Diego González, quien actúa -junto a Guillermina McDonald- como abogado de Jurgen Mossack, interrogó al perito sobre si el resto de los funcionarios del Ministerio Público que participaron en la revisión de los servidores de Mossack Fonseca eran peritos informáticos, a lo que respondió que no.
González también preguntó a Rivera Calle si los discos compactos utilizados para descargar la información digital fueron resguardados cumpliendo con la cadena de custodia, a lo que respondió que sí.
Por la tarde, compareció como testigo Zuleyka Mitre, esposa del imputado Zacgary Lundgren, quien está acusado por haber manejado y recibido fondos de Argentina, usados para la compra de varios apartamentos en la ciudad de Panamá.
Mitre aseguró que su esposo es inocente de los cargos que se le imputan y que las transacciones realizadas fueron legítimas.
Luego, ocupó el estrado el perito Miguel A. Martínez, quien realizó un análisis de los servidores de Mossack Fonseca y determinó que no hubo alteraciones en los datos contenidos en esos equipos.
Quince testigos solicitados por los abogados defensores no comparecieron en la audiencia.