La fiscal de Delitos contra la Fe Pública, Soshaiel Castillo, reveló que el segundo lote de 271,281 monedas ‘martinellis’ falsas, decomisadas el pasado jueves, estaba camuflado entre arandelas de cobre.
Castillo detalló que este nuevo lote fue ubicado en la misma bodega donde, la semana pasada, se hallaron 183,202 monedas falsas.
La funcionaria indicó que aún no se ha confirmado si las monedas decomisadas llegaron al país en el mismo embarque que el primer lote. Su despacho está realizando diversas diligencias para verificar la procedencia del material falsificado.
La investigación fiscal apunta a la existencia de una compleja red dedicada a la fabricación, introducción y distribución de monedas falsas en el territorio nacional.
Asimismo, las autoridades explicaron que el embarque decomisado la semana pasada generó sospechas debido a inconsistencias en la documentación presentada para su ingreso al país.
Esto motivó a la Autoridad Nacional de Aduanas a inspeccionar el depósito ubicado cerca de la Plaza Comercial Chilibre.
En el análisis de las monedas decomisadas se confirmaron serias inconsistencias en comparación con las legítimas. Entre ellas, se observó que tienen un peso y un tamaño ligeramente menor.
Además, estas monedas difieren en el color respecto a las originales y la incrustación de níquel y cobre se desprende fácilmente si son golpeadas o se caen.
La fiscal Castillo precisó que aún hay personas que no han sido vinculadas formalmente al proceso, pero anticipó que en las próximas semanas se llevarán a cabo nuevas diligencias relacionadas con el caso.
Por este caso, el Ministerio Público imputó cargos a Zhuying Luo, Yanghua Zhang y Manuel Antonio Chang, quienes recibieron la carga en una bodega ubicada en Plaza Chilibre.
Las investigaciones revelaron que las monedas llegaron en un contenedor a France Field, en la provincia de Colón. Posteriormente, fueron trasladadas en un camión hasta Chilibre, donde se almacenaron en una bodega.
Datos obtenidos durante el proceso indican que las monedas procedían de una empresa ubicada en la provincia de Guangdong, China.
Las monedas originales fueron fabricadas por la Royal Canadian Mint (RCM) durante el gobierno del expresidente Ricardo Martinelli. Estas son bimetálicas, con un aro de níquel y un centro de cobre.
Durante el gobierno del expresidente Laurentino Cortizo, se decidió retirar de circulación las monedas conocidas como “martinellis” para sustituirlas por billetes. Sin embargo, la actual administración del Banco Nacional de Panamá permitió que estas monedas continuaran en circulación.
Ante el riesgo de falsificaciones, algunos comercios locales han optado por no aceptar los “martinellis”.