La reapertura de la investigación sobre lo sucedido al sacerdote Héctor Gallego busca establecer quiénes son los autores intelectuales y materiales de su desaparición, registrada el 9 de junio de 1971 en Santa Fé, provincia de Veraguas, así como determinar dónde están sus restos.
Lo anterior se desprende del fallo emitido el 3 de diciembre de 2024 por el Tribunal Superior de Segundo Distrito Judicial (Coclé y Veraguas), que lleva la firma de los magistrados Nelson Miguel Morales e Idalides Pinilla y el salvamento de voto del magistrado Juan Francisco Castillo.
La petición de reapertura fue realizada por la fiscal Tania Sterling, quien entre los argumentos presentados al tribunal señaló que un informe de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) recomendó investigar a través de un plan de búsqueda adecuado, con resultados medibles en el tiempo y con la participación de los familiares de víctimas, el destino o paradero de Jesús Héctor Gallego Herrera y, de ser el caso, adoptar las medidas necesarias para identificar y entregar a sus familiares sus restos mortales.
En su decisión, los magistrados del Tribunal Superior de Coclé y Veraguas precisan que el fallo condenatorio expedido en 1994 contra los militares retirados Nivaldo Madriñan, Melbourne Walker y Eugenio Magallón por la desaparición del sacerdote fue en su condición de cómplices, y que se hace necesario ubicar a los autores intelectuales y materiales de estos hechos.
El fallo remarca que en este caso se aprecia la supuesta participación de otros ex oficiales de la Guardia Nacional, entre ellos el exGeneral Manuel Antonio Noriega (ya fallecido) y la posible complicidad de otras personas que comandaban el cuartel de Los Pumas de Tocúmen, en donde algunos testigos señalan haber visto al sacerdote.
📹▶️| El Fiscal Alexis Medina informa sobre la reapertura del caso del Sacerdote Jesús Héctor Gallego. 👇 pic.twitter.com/UVYTa4O2fc
— Procuraduría General de la Nación (@PGN_PANAMA) December 13, 2024
El fallo detalla que existe información que en el área del Motor Pool del cuartel se exhumó gran cantidad de huesos humanos, y según las investigaciones que se hicieron, entre ellos pueden estar los de Gallego. Hasta el momento, por falta de recursos en el Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses, no se ha identificado a quién pertenecen esos huesos.
También destacan los magistrados en el fallo que la desaparición forzada se considera un crimen de lesa humanidad, una calificación que conlleva importantes consecuencias jurídicas y penales. Estos crímenes son reconocidos como los más atroces que un individuo puede cometer contra otro, lo que implica su carácter imprescriptible y la obligación de ser perseguidos.
Salvamento de voto
El magistrado Juan Francisco Castillo, quien emitió un salvamento de voto consideró que después de tanto tiempo, es improbable que se logre: dar con el paradero del sacerdote, así como lograr la identificación de los autores y partícipes de este hecho, mucho menos, garantizar los derechos de las víctimas y conocer la verdad de lo ocurrido.
Castillo también precisa que la valoración objetiva de la prueba aportada por la fiscalía no sustenta la decisión de reapertura del caso.
El Comité de Familiares de Desaparecidos Héctor Gallego (Cofadepa-HG) ha exigido durante años la identificación de los restos óseos ubicados en el antiguo Cuartel de Los Pumas de Tocumen, uno de los cuales fueron identificados como los de Heliodoro Portugal.
Parte de estos restos permanecen bajo custodia del Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses para ser sometidos a pruebas de ADN.