La rutina diaria de cientos de residentes de la calle 54, en Obarrio, en pleno corazón de la capital, fue interrumpida a las 7:15 de la mañana de ayer martes 1 de noviembre. Una potente explosión en el piso 12 del PH Urbana, un edificio de 33 pisos, rompió ventanas, derrumbó muebles, arrojó escombros que afectaron a ciudadanos, vehículos, y dejó un saldo de 21 personas heridas, entre ellas, una mujer que sufrió quemaduras en el 80% de su cuerpo.
La onda expansiva afectó los ventanales de, al menos, 10 edificaciones de la zona, lo que provocó la evacuación de unas 600 personas. Escombros metálicos y hasta aires acondicionados cayeron en las piscinas ubicadas en las áreas sociales de construcciones afectadas. Por instinto, la gente corría hacia la calle, sin saber lo que realmente pasaba. La explosión se escuchó en otras áreas, como El Cangrejo, El Carmen, Vía España y la Transístmica.
‘Todo voló por los aires’
Una trabajadora doméstica narró que se encontraban preparando el desayuno cuando escuchó un zumbido muy fuerte. De pronto, añadió, todo en la cocina voló por los aires. “No sabía qué hacer, traté de ayudar a mi jefa, que presentaba algunas cortaduras a causa de los vidrios lanzados por la explosión, y luego bajamos por las escaleras hasta la calle”, relató aún afectada.
Un hombre que trabaja como conserje en un edificio aledaño contó que en la mañana de ayer martes tenía que limpiar las ventanas del inmueble, pero como llegó tarde al trabajo, pospuso esta labor, lo que a su juicio lo salvó de salir herido por el impacto de la explosión.
Ambulancias del Cuerpo de Bomberos de Panamá (CBP), del Sistema Único del Manejo de Emergencias (Sume) 911 y de hospitales privados acudieron a la escena para atender a los heridos y trasladarlos a los centros hospitalarios.
Abdiel Solís, director del Cuerpo de Bomberos, informó que el suceso se registró en el piso 12 del edificio, y añadió que se ordenó una investigación para determinar las causas, ya que algunos residentes informaron que días antes sintieron un fuerte olor a gas.
Recalcó que se ordenó una revisión de los tanques de gas y de las tuberías que lo llevan hasta los apartamentos del edificio Urbana. Sin embargo, alegó que es muy temprano para determinar las causas de la explosión.
Los bomberos también realizaron trabajos de verificación de las estructuras de los edificios adyacentes, con el propósito de precisar si mantienen daños, y así decidir si sus residentes pueden volver a ocuparlos.
Solís también confirmó que el edificio del siniestro recibió el permiso de ocupación en mayo pasado.
¿Gas?
En Twitter, una persona de nombre Ainoa Pupo, aseguró lo siguiente: “fue gas mi estimado. Se lo puedo garantizar. Vivo en el piso 30 de dicho edificio y llevamos dos semanas quejándonos de que la alarma se saltaba todos los días y provenía del piso 12 porque los detectores avisaban al seguridad y a la administración y no se tomaron las medidas”.
También salió a la luz una carta del pasado 28 de octubre, que la administración del edificio envió a los propietarios y residentes. En la nota se informa que el 29 de octubre estaba agendada una inspección general en los apartamentos que tenían instalados calentador de gas. “Se les agradece permanecer en sus apartamentos en el transcurso de la mañana a partir de las 8:00 a.m. hasta las 12 md para que los técnicos puedan verificar e inspeccionar los trabajos realizados”, dice la misiva.
Investigación
Por su parte, el fiscal de la sección de Atención Primaria del Ministerio Público, Julio Villarreal, dijo que se abrió una investigación de oficio para establecer las causas del siniestro y determinar si existe algún tipo de responsabilidad penal.
Villarreal recalcó que, al existir personas lesionadas por la explosión, el Ministerio Público procede a investigar si las lesiones causadas fueron producto de algún acto de negligencia en el manejo de las instalaciones de gas.
El funcionario judicial adelantó que solicitarán un informe al CBP sobre las causas de la explosión, y pedirán copia de las evaluaciones realizadas antes de ordenar la ocupación del inmueble. Precisó que funcionarios de criminalística del Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses, revisarán la escena.
Hablan el promotor y la constructora
Por su parte, GK Developers, promotor del edificio; e Ingeniería RM, la constructora, en un comunicado aseguraron lamentar el incidente, e informaron que su personal se ha acercado a los vecinos de los edificios aledaños para cooperar en lo que se requiera en estos momentos. “El PH Urbana es una obra entregada y en proceso de ocupación desde mayo de 2022, cuando recibió las certificaciones necesarias de ocupación y de seguridad por las autoridades competentes, entre ellas los sistemas de prevención de incendios, que incluyen las pruebas de hermeticidad requeridas por la ley”, aseguraron las dos compañías en el comunicado.
GK Developers S.A, según el Registro Público, tiene como presidente a Henry Sion Cohen Harari.
‘Falta de mantenimiento’
En tanto, Rutilio Villarreal, de la Sociedad de Ingenieros y Arquitectos de Panamá, aseguró que la mitad de los edificios de la ciudad de Panamá tienen o han tenido problemas con el suministro de gas y que ello se debe a la falta de mantenimiento. Villarreal estimó que estas anomalías se deben básicamente a la falta de personal idóneo y calificado para dar mantenimiento a estos equipos.
Otros sucesos
El pasado 30 de agosto, una adulta mayor falleció tras una explosión e incendio ocurrido en un edificio en la Vía Argentina. Mientras que en octubre de 2021 se reportó un incendio en el PH Allure, ubicado cerca del Parque Urracá, en el corregimiento de Bella Vista.
En marzo del 2019 también se produjo una alerta de incendio en el edificio Mirador del Pacífico, en calle 73 en el corregimiento de San Francisco.
Hay más casos. En mayo de 2019, un niño falleció tras una explosión ocurrida en PH Costa Mare, ubicado en el corregimiento de Don Bosco. Según las investigaciones, la explosión, en la que también resultaron heridas otras dos personas, se debió a una fuga de gas.
