Frank Guelfi, el psiquiatra que firmó la incapacidad del expresidente Ricardo Martinelli, fue destituido hace 11 años del Hospital Santo Tomás (HST), entidad a la que por lo menos en cuatro oportunidades demandó -sin éxito- ante la Corte Suprema de Justicia.
En todas estas ocasiones, sus demandas fueron rechazadas por la Sala Tercera de lo Contencioso Administrativo.
La primera acción de Guelfi fue promovida contra una nota fechada el 21 de diciembre de 2001, dictada por la Jefatura del Servicio de Psiquiatría del Hospital Santo Tomás, en la que se le comunicó al médico la suspensión del cargo por dos días y el descuento de salario correspondiente, por ausentarse de las actividades docentes dirigidas a los residentes, internos y estudiantes de medicina coordinadas por el nosocomio. El 27 de marzo de 2003, la Sala Tercera declaró que no es ilegal la nota sancionatoria expedida por la Jefatura del Servicio de Psiquiatría y negó la demanda contencioso administrativa presentada por Guelfi.
La segunda acción fue dirigida contra una nota del 18 de febrero de 2002, también del jefe del Servicio de Psiquiatría del Hospital Santo Tomás, que sancionó a Guelfi por -nuevamente- ausentarse sin justificada razón de las reuniones académicas e incumplir tareas propias de la labor a su cargo, y ordenó su suspensión del cargo por tres días. El doctor Marcel Penna, en representación del hospital, informó entonces que la sanción impuesta cumplió con el debido proceso previsto en el Reglamento de Recursos Humanos del HST, "y que esa persona ha sido sancionada antes".
El 21 de febrero de 2003, la Sala Tercera declaró que no era ilegal la nota del 18 de febrero de 2002 y negó la demanda de Guelfi.
Posteriormente, el médico acudió otra vez a la Corte para reclamar por una nota del 23 de mayo de 2005, también del jefe de Servicio de Psiquiatría del HST, Marcel Penna, que dictó una suspensión de cinco días "por incumplimiento del reglamento de la institución". Esta demanda igualmente fue rechazada por la Sala Tercera el 23 de agosto de 2005.
Seguidamente, el 11 de septiembre de 2006, la Sala no admitió otra demanda de Guelfi, esta vez contra la nota del 2 de junio de 2005 del HST, que dicta una suspensión de cinco días contra el psiquiatra.
Guelfi ya no labora en el HST. En Telemetro Reporta, Penna dijo que fue despedido por "funcionamiento deficiente". Guelfi fue destituido el 29 de febrero de 2008.
Igualmente, el 18 de julio de 2005, este psiquiatra denunció al Estado panameño ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) en la cual se alega que nueve pacientes de la Sala 25 del Servicio de Psiquiatría del Santo Tomás habrían sido víctimas de malos tratos, negligencia médica, mala praxis y homicidios culposos. También menciona que Melany Narváez, una de las dos homicidas del exvicepresidente del Colegio Nacional de Abogados Juan Carlos Dudley, fue condenada a 28 años de prisión "a pesar de su condición mental".
[Lea aquí la nota 'Ratifican condenas por el homicidio de Juan Carlos Dudley'].
En el año 2013, Narváez se fugó del Centro Femenino de Rehabilitación. Dos años antes de este hecho, Guelfi todavía insistía en su "grave estado de salud mental".
En su petición a la CIDH, Guelfi alegó que por haber defendido que Narváez fue condenada pese a su "discapacidad mental", fue víctima de persecución laboral. Entre 2005 y 2008, Guelfi presentó denuncias al respecto ante la Procuraduría General de la Nación. El primer proceso se aplicó la excepción de "retardo injustificado en la decisión definitiva", y en el segundo se dictó un sobreseimiento definitivo.
El Estado panameño respondió a la CIDH que todos los procesos emprendidos por el psiquiatra son "infundados, temerarios y carentes de credibilidad".
Este martes, los jueces Roberto Tejeira, Arlene Caballero y Raúl Vergara ordenaron que el Ministerio de Salud verificara las circunstancias en las que se originó el certificado de incapacidad psiquiátrica que Guelfi otorgó a Martinelli y que fue utilizado por la defensa del expresidente para pedir la suspensión del juicio oral. Guelfi dice que Martinelli está deprimido y habla de deseos de suicidio, llora, le sudan las manos y tiene ansiedad.
