La organización Transparencia Internacional (TI) ha cuestionado duramente la orden adoptada por un magistrado brasileño que invalidó todas las pruebas derivadas del acuerdo de clemencia de Odebrecht en ese país, a solicitud del expresidente Ricardo Martinelli, entre otros imputados.
TI advirtió que esa decisión asumida por el magistrado José Antonio Dias Toffoli, del Tribunal Supremo Federal (STF, por sus siglas en portugués), “garantiza la impunidad de numerosos casos de corrupción a gran escala en Brasil y en otros países”.
En un informe sobre cómo la falta de independencia judicial frena la lucha contra la corrupción, TI señala que este escenario “debilita el Estado de derecho y promueve la impunidad de los poderosos y los criminales en perjuicio de las personas y del bien común”.
El pasado viernes, Dias Toffoli acogió la solicitud de Martinelli y su amiga Aurora Muradas para impedir el uso de pruebas aportadas en Brasil por los delatores de Odebrecht, en su acuerdo de indulgencia, según informó el diario Folha de S. Paulo en su edición digital.
Antes, Dias Toffoli adoptó una decisión similiar que favoreció a Riccardo Francolini y Juan Antonio Niño. Ambos, junto a Martinelli y Muradas, serán enjuiciados por el caso de los sobornos que Odebrecht repartió en Panamá, en noviembre próximo.
Esa misma estrategia la siguió también el expresidente de Perú, Ollanta Humala.
TI, en un informe en el que sostiene que la falta de independencia judicial frena el combate a la corrupción a nivel regional, menciona que la independencia del sistema de justicia en Brasil ha tenido retrocesos significativos por casi una década.
“La participación de figuras importantes de la operación Lava Jato, incluido el juez y el fiscal principales, en el gobierno del expresidente Jair Bolsonaro ha puesto seriamente en duda la independencia del Poder Judicial y la propia investigación. A pesar de que Lava Jato ha cumplido este año su décimo aniversario y que cuenta con el mérito innegable de haber expuesto esquemas de gran corrupción, también ha sido blanco de críticas por haber comprometido su imparcialidad”, indica TI.
Agrega que tanto Bolsonaro como el actual presidente Luiz Inácio Lula da Silva han eludido procesos para aumentar la legitimidad y la independencia del Poder Judicial al designar a personas de confianza en la función de fiscal general.
Corruption remains a significant challenge in the Americas. A lack of judicial independence undermines the rule of law and promotes impunity. It's time for robust reforms to ensure accountability and justice for all. #CPI2023 ➡️ https://t.co/ulUbvi5IGo pic.twitter.com/1nrHNgXwni
— Transparency International (@anticorruption) March 27, 2024
Sobre Dias Toffoli, la organización menciona que “la decisión controversial que tomó Lula de nombrar a su exabogado como magistrado del Supremo Tribunal Federal concita aún más preocupación”.
Dias Toffoli es miembro del Tribunal Supremo Federal de Brasil desde el año 2009, gracias a Lula, a quien también favoreció anulando todas las evidencias en su contra aportadas por los delatores de Odebrecht.
Como se recuerda, Lula fue condenado a casi 10 años de prisión en 2017, en el caso Lava Jato, tras ser hallado culpable de “corrupción pasiva”, es decir, de recibir sobornos de la constructora brasileña OAS, así como del delito de lavado de dinero.
El expresidente cumplió 18 meses de prisión entre 2018 y 2019, pero su condena fue anulada por la Corte Suprema de Brasil en 2021, no porque fuera inocente, sino porque la Corte consideró que se cometieron violaciones a su proceso penal.
“La prisión de Lula puede considerarse uno de los mayores errores judiciales de la historia del país”, declaró Dias Toffoli en septiembre de 2023, al tiempo que –a solicitud de los abogados de Lula– anuló todas las pruebas que se obtuvieron contra el presidente en el caso Odebrecht, las cuales también declaró inutilizables en cualquier jurisdicción en el futuro.
Y justo por esa declaración es que ahora varios acusados intentan o han logrado zafarse de sus procesos judiciales en Brasil y en otros países, incluido Panamá.