Seis denuncias por la presunta comisión de delitos contra el honor en perjuicio del expresidente Ricardo Martinelli fueron archivadas en audiencias celebradas ayer ante jueces de garantías del sistema penal acusatorio del Primer Distrito Judicial.
Las querellas, presentadas por abogados de Martinelli contra I. Roberto Eisenmann, fundador del diario La Prensa; Mariela Ledezma y Anneth Planells (una contra cada una y otra en conjunto), conductoras del programa radial Sal y Pimienta; directivos de Corporación La Prensa (Corprensa) y periodistas de Mi Diario, así como contra un usuario de Twitter, fueron desestimadas por los jueces de garantías, tras considerar que en ninguna el querellante pudo establecer la posible comisión de un delito por parte de los querellados.
En la primera de la audiencias, que se desarrolló en horas de la mañana, el juez de garantías José Félix Sánchez validó la decisión de la fiscal Fátima Sánchez al considerar prescrita la acción penal contra Ledezma.
La querella, presentada por Martinelli en 2018, guardaba relación con cuestionamientos de Ledezma en redes sociales y medios de comunicación, pero la fiscal estimó que por el tiempo transcurrido el delito debía declararse prescrito.
Juan Antonio Tejada hijo, abogado de Ledezma, sustentó ante el juez que no había delito y que algunos de los enunciados que planteó la defensa del exmandatario estaban prescritos de acuerdo con el Código Penal, por lo que el juez mantuvo el archivo de la causa.
En el caso de Planells, el juez Francisco Carpintero consideró que la abogada Alma Cortés, en representación de Martinelli, no acreditó la comisión de ningún delito y que los mensajes difundidos por la querellada a través de Twitter y en un programa televisivo el 24 de mayo de 2018, tampoco se constituían en hecho punible.
En su alegato, la fiscal Sánchez detalló que se debía valorar que los comentarios de Planells fueron realizados cuando se estaba en el proceso de extraditar al exmandatario desde Estados Unidos, y, además, que para ese momento éste mantenía su condición de diputado del Parlamento Centroamericano y, por tanto, como funcionario público estaba sujeto al escrutinio de la población.
Este alegato fue secundado por el juez Carpintero, al señalar que es “casi inevitable que un servidor público no sea objeto de críticas.”
También se archivó otra querella que por razones similares presentó Martinelli contra Ledezma y Planells.
Carpintero también desestimó los cargos contra Eisenmann, con el argumento de que éste nunca hizo un señalamiento directo contra Martinelli en una entrevista con el periodista Álvaro Alvarado el 15 de agosto de 2018, en la que dijo: “el detenido de El Renacer sigue controlando parte de la Corte”.
Para Carpintero, la querella nunca pudo establecer que en su declaración Eisenmann hiciera alusión al expresidente, por lo que validó la decisión de la fiscalía de archivar la querella.
También planteó que en estos casos debe haber una referencia precisa y directa de la afectación.
En cuanto a la querella contra los directivos de Corprensa Diego Quijano y César Tribaldos, y los periodistas de Mi Diario Lorenzo Ábrego (director), Luis Enrique Brathwaite, Martha Vanessa Concepción y Sonia Navarro, el juez de garantías concluyó que no hubo delito.
Además, el juez desestimó la querella contra un tuitero, porque ni siquiera se pudo determinar quién estaba detrás de la cuenta en esa red.
