El presidente de la República, José Raúl Mulino, defendió la reciente llegada de migrantes deportados desde Estados Unidos y negó que el proceso viole leyes o acuerdos internacionales.
Durante su conferencia de prensa semanal de este jueves 20 de febrero, el gobernante afirmó que la cooperación en materia migratoria se basa en la “reciprocidad” y criticó la falta de atención cuando el país enfrentaba un flujo masivo de migrantes por la selva del Darién.
“A mí me sorprende que en este caso, que vienen en dirección opuesta, es cuando levantan la voz; por 299. Cuando teníamos centenas de miles en el Darién hace un año, nadie decía nada”, indicó.
Mulino detalló que, entre los 299 migrantes recibidos, hay 157 mujeres, 142 hombres, 12 grupos familiares y 24 menores de edad. Asimismo, indicó que 13 personas ya han retornado voluntariamente a sus países, mientras que 97 se encuentran en el Darién esperando su traslado.
El mandatario enfatizó que Panamá no ha incurrido en costos por este operativo, ya que los gastos son cubiertos en su totalidad por la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) y bajo el paraguas del memorándum de entendimiento con Estados Unidos, firmado por la administración de Mulino y el expresidente de los Estados Unidos, Joe Biden, el pasado 1 de julio de 2024.
Sin embargo, el mandatario luego afirmó que el recibimiento de los migrantes se trata de un esfuerzo bilateral dentro de un marco de cooperación internacional, en el que participan otros países de la región, como Costa Rica, Guatemala y El Salvador.
También aseguró que los migrantes están siendo tratados con dignidad. “Es falso y niego por falsedad que los estamos maltratando. Hay que ser bien perverso para pensar que nosotros, como panameños, vamos a maltratar a esa pobre gente que son víctimas de una realidad”, declaró, agregando que el manejo ordenado de la situación evita un problema mayor para el país.
Según Mulino, el número de migrantes cruzando el Darién en dirección hacia los Estados Unidos ha disminuido significativamente en comparación a meses anteriores, con 250 personas contabilizadas hasta el mes de febrero.

El presidente también rechazó las críticas sobre falta de transparencia en el proceso y aclaró que las circunstancias migratorias cambian constantemente. “Nosotros hemos colaborado con la logística. Aquí no hay nada opaco”.
Además, dio a conocer que le ha solicitado al canciller, Javier Martínez-Acha, iniciar la redacción de un nuevo memorándum de entendimiento con Estados Unidos para regular futuras operaciones migratorias.
Tres vuelos con migrantes llegaron a Panamá procedentes de Estados Unidos. Se trata de personas de nacionalidades diversas: Irán, China, Afganistán, Siria, entre otros.
El tema, incluso, llegó hasta las páginas de The New York Times, diario que publicó una nota titulada: Mientras Trump “exporta” deportados, cientos quedan atrapados en hotel de Panamá.
La noticia recoge testimonios de algunos de estos migrantes. “En el hotel, al menos una persona intentó suicidarse, según varios migrantes. Otra se rompió una pierna al intentar escapar. Una tercera envió un mensaje lastimero desde un teléfono móvil oculto: ‘Solo un milagro puede salvarnos’”, se lee en el reportaje, firmado por cinco periodistas.