Una denuncia penal contra el director de la Autoridad de Aeronáutica Civil (AAC), Gustavo Pérez Morales, y de Seguridad Aérea, Abdiel Fernández, fue interpuesta ante la Fiscalía Anticorrupción, luego que una investigación de La Prensa revelara que se estaría utilizando la entidad como trampolín para negocios personales.
La denuncia penal por la presunta comisión de delitos contra la administración pública en sus modalidades de corrupción de servidores públicos, tráfico de influencias, asociación ilícita para delinquir, blanqueo de capitales y enriquecimiento ilícito fue interpuesta por el abogado Justino González.
En su denuncia, González hace referencia a que Fernández es accionista mayoritario de la empresa PFM Panamá, que solicitó a Pérez Morales certificarla como Taller Aeronáutico Nacional (TAN).
Resalta que la investigación periodística reveló que Fernández tiene bajo su mando la jefatura de la dirección de Aeronavegabilidad, encargada de otorgar la certificación como TAN que busca adquirir PFM Panamá. “Queremos que la Fiscalía Anticorrupción determine si aquí hay conflicto de interés, ya que un superior estaría utilizando su influencia para que el de menor jerarquía haga lo que él quiere [es decir, certificar como TAN a PFM Panamá]”, resaltó el abogado.
En febrero de 2021, PFM Panamá aportó a Pérez Morales varios documentos, entre ellos, la declaración jurada de acciones certificadas por un notario público en la que se afirma que Fernández –funcionario en la AAC desde septiembre de 2019– posee 40 acciones, mientras que sus otros dos socios, 30 acciones cada uno.
En la solicitud de PFM Panamá a Pérez Morales se resalta que uno de sus potenciales clientes es la aerolínea Bocas Air Company, empresa que recibió su certificación de la Dirección de Seguridad Aérea, en marzo de 2021.
Pérez Morales se negó a entregar a este medio la lista de empresas que se han certificado como TAN y las que están en ese proceso. El funcionario justificó su negativa en la Ley de Protección de Datos Personales.
“El jefe de Seguridad Aérea se solicita él mismo la certificación [como TAN] y él mismo se aprueba. Esto es absurdo, esto es un delito”, se quejó González.
En entrevista con este medio en mayo pasado, Fernández negó sus vínculos con esta empresa, y por lo tanto, considera que no hay conflicto de interés, pese al contenido de la declaración jurada de acciones de PFM Panamá.
En abril pasado, la AAC suspendió operaciones de Bocas Air por “peligrosas” situaciones, anomalías y desgreño administrativo, tras realizar una investigación porque a una de sus aeronaves se le desprendió la puerta de carga tras despegar.
Este medio tuvo acceso a notas del personal de la AAC que advertían de supuestas “influencias externas” para certificar a Bocas Air.
“Nos parece grave que la seguridad del país esté en peligro” por estas certificaciones de la AAC, concluyó González en su denuncia.