Las actividades delictivas han ocupado un espacio importante en la agenda pública en los últimos meses. Estadísticas del Ministerio Público revelan que entre enero y octubre de este año, en Panamá se habían registrado 5 mil 975 denuncias por la comisión de diversos hechos delictivos, una cifra ligeramente inferior a la del mismo periodo de 2021, cuando se reportaron 6 mil 303.
Sin embargo, ambas cifras superaron a los 4 mil 899 casos de 2020, el año en que se declaró la pandemia respiratoria por la covid-19.
Los números también ponen en evidencia que los robos, asaltos y hechos similares están presentes con más frecuencia en las calles y barrios del país. En los primeros 10 meses de 2022 se habían reportado 4 mil 777 denuncias de robo en el Ministerio Público, 303 más que en 2021. Significa que hasta el mes pasado, en promedio, se registraron 16 casos de robo por día.
Bancos en la mira
Entre los hechos delictivos más relevantes están los tres asaltos y un hurto perpetrados contra cuatro bancos en la capital. Estos sucesos se concretaron entre agosto y septiembre de este año. Hay 20 personas detenidas por estos hechos, según dio a conocer John Dornheim, director de la Policía Nacional.
El primero fue el hurto cometido entre los días 3 y 4 de agosto en la sucursal del Banco Nacional de Panamá, ubicada en calle 26, Calidonia. Los ladrones sustrajeron $678 mil. Por este caso, el Ministerio Público imputó cargos a cinco personas, tres de las cuales son colaboradores del banco, mientras que los otros dos son particulares.
En la lista también está el robo a Banesco, ubicado entre las calle 72 y 50, en San Francisco. Aquí los delincuentes lograron sustraer $6 mil 725. Este hecho se dio el pasado 3 de septiembre. Mientras que el 27 de septiembre se produjo un asalto a la Caja de Ahorros de Villa Lucre, distrito de San Miguelito, de donde se llevaron $39 mil 633.
En tanto que el 10 de octubre de este año, cinco personas armadas ingresaron a otra sucursal de la Caja de Ahorros, esta vez en El Ingenio, Betania, y salieron de ahí con $60 mil.
El turno de las joyerías
Las joyerías también han sido víctimas de la delincuencia. El pasado 12 de octubre, cinco hombres asaltaron la joyería Brilat, ubicada en avenida Samuel Lewis, Obarrio.
Al día siguiente, un grupo de personas armadas asaltó una joyería en avenida México. Por ambos casos ya hay detenidos. En tanto que el pasado 26 de octubre, un grupo de hombres armados asaltó El Diamante, una joyería en la vía Veneto, en pleno corazón de la ciudad. La Policía capturó a los responsables del hecho.
También las farmacias
Las farmacias también se han convertido en objetivo de los delincuentes. La noche del pasado domingo 13 de noviembre, las farmacias Metro y Farma Value, ubicadas en Betania y San Francisco, respectivamente, fueron blanco de asaltos a mano armada por varios hombres que se llevaron dinero de las cajas. Supuestamente, los dos hechos no están relacionados. Un carro utilizado por estos grupos criminales fue encontrado abandonado en Betania.
El ministro de Seguridad Pública, Juan Pino, explicó que los asaltos fueron cometidos por personas que recientemente salieron de prisión. Añadió que, a través de un “trabajo de inteligencia”, se ubicó a varios de los que participaron en los atracos, pero que aún están tras la pista de otros sospechosos.
El ministro atribuyó el aumento de los robos a bancos y otros comercios, “al éxito de las autoridades en el decomiso de drogas”, lo que, añadió, ha obligado a los delincuentes a buscar otras vías para lograr ingresos. Recalcó que en lo que va del 2022 se han decomisado 110 toneladas de drogas.
“Esto es conocido como el efecto globo: cuando se aprieta por un lado, la actividad criminal se traslada a otra área o sector”, explicó.
Dijo que otra modalidad adoptada por las pandillas es el reclutamiento de menores de edad, quienes son usados como sicarios para perpetrar atentados contra blancos específicos.
También advirtió que debe evitar la permisividad de actividades como los denominados parking, en los que se vende licor a menores y que usualmente terminan en riñas con armas de fuego.
Entre enero y octubre de 2022, en Panamá se habían cometido 401 homicidios, una cifra ligeramente inferior a la del 2021, cuando se perpetraron 463 crímenes.
Una opinión
Rodolfo Aguilera, exministro de Seguridad Pública, opina que la estrategia “represiva” de la actual administración no ha dado resultados, ya que los niveles de inseguridad en las calles han aumentado tras la pandemia por la covid-19.
Aguilera enfatizó que sin una política definida de prevención, dirigida básicamente a los jóvenes en riesgo social, es muy difícil disminuir la delincuencia.
Calculó que más del 80% de los privados de libertad que cumplen sus condenas en algún centro penitenciario son reincidentes. Esto sucede, explicó, porque no tienen oportunidades para conseguir trabajo para alimentar a su familia. Y entonces, añadió, caen en un círculo vicioso: entran y salen de prisión.
Habla la Cámara de Comercio
La Cámara de Comercio, Industria y Agricultura de Panamá considera “lamentable” y preocupante la actividad criminal en las calles.
El gremio hizo un llamado a las autoridades para que hagan “un uso efectivo de las cámaras de seguridad, así como la fuerza policial”.
“Insistimos en la necesidad de crear condiciones para la generación de empleo y evitar este tipo de actos delictivos. Si bien es cierto en algunos casos se habla de crimen organizado, no podemos dejar de lado que los niveles de desempleo siguen altos y esto tiene un impacto en este tipo de delitos”, añadió.
El pasado lunes 7 de noviembre, ante los casos de robos a entidades bancarias, joyerías y otros establecimientos comercios, el comité ejecutivo y los directores principales de la Cámara se reunieron con el ministro Pino, para hablar del tema. Se desconoce el resultado de la reunión.