Un tribunal de juicio de Panamá Oeste declaró no culpables a los nueve imputados por la presunta comisión del delito de secuestro en perjuicio de Moisés Cortizo, hermano del expresidente Laurentino Cortizo, perpetrado el 11 de marzo de 2021 en los alrededores de la finca La Fortaleza, en Playa Leona de La Chorrera, provincia de Panamá Oeste.
Las juezas Yorlenys Fruto, Yamileth Roble y Elka Rodríguez dictaron un veredicto absolutorio a favor de los nueve investigados, tras analizar las pruebas presentadas por la Fiscalía Especializada contra la Delincuencia Organizada y los abogados de la defensa.
El juicio se inició el pasado 10 de diciembre de 2024 y tuvo una duración de 35 días, durante los cuales la fiscalía y la defensa presentaron testigos y pruebas documentales que fueron valoradas por el tribunal.
José Luis Galloway, uno de los abogados de la defensa, precisó que en este caso la fiscalía no pudo probar que los imputados privaron de la libertad a Cortizo ni que exigieron un pago como rescate para su liberación.
Galloway también explicó que, durante el juicio, varios de los testigos presentados por la fiscalía incurrieron en contradicciones sobre cómo se dieron los hechos y tampoco se pudo establecer que los imputados mantenían armas de fuego en su poder.
Los abogados defensores pidieron al tribunal desestimar varias de las evidencias aportadas por la fiscalía, argumentando que se había violado la cadena de custodia necesaria para garantizar su legalidad.
Según las investigaciones, el intento de secuestro contra Moisés Cortizo fue frustrado gracias a una operación de seguimiento y vigilancia realizada en conjunto entre la Policía Nacional y el Ministerio Público.
Durante el operativo, también se decomisaron tres armas de fuego y un vehículo que presuntamente sería utilizado para trasladar a la víctima.
En otros operativos realizados posteriormente, se capturó a otras personas que presuntamente tenían algún grado de participación en el intento de secuestro.
Según los informes de las autoridades, los investigados simularon interés en la compra de una finca propiedad de Cortizo, ubicada en La Mitra de La Chorrera, provincia de Panamá Oeste. Para perpetrar el plan de secuestro, ingresaron previamente a la propiedad y ocultaron las armas que utilizarían.

