Tras una petición de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), el Tribunal Superior del Segundo Distrito Judicial (Coclé y Veraguas) ordenó la reapertura de las sumarias por la desaparición del sacerdote Héctor Gallego, ocurrido en 1971, tras ser detenido por miembros de la Guardia Nacional en Santa Fe, provincia de Veraguas.
El Ministerio Público informó que la Fiscalía Regional de Veraguas dispuso la reapertura de la investigación tras la decisión del Tribunal Superior del Segundo Distrito Judicial, que acogió la solicitud de la CIDH.
En un juicio realizado el 26 de octubre de 1993, un jurado de conciencia condenó a los militares Melbourne Walker, Eugenio Magallón y Nivaldo Madriñán por el secuestro y asesinato de Gallego, cuyo cuerpo nunca fue recuperado.
En 1999, se solicitó la revisión de unos restos humanos encontrados en el antiguo Cuartel de Los Pumas de Tocumen, ante la posibilidad de que fueran los del sacerdote.
En 2003, la CIDH recibió una petición del Comité de Familiares de Desaparecidos Héctor Gallegos (Cofadepa-HG) sobre hechos de violencia, abuso de poder y desapariciones forzadas cometidas por la dictadura militar en Panamá (1968-1989).
En octubre de 2015, la CIDH emitió un informe de admisibilidad en el que destacaba posibles violaciones a varios artículos de la Convención Americana sobre Derechos Humanos durante ese período.
Sin embargo, en 2018 la CIDH fue informada de que el gobierno y los miembros de Cofadepa-HG habían iniciado un proceso de acercamiento voluntario para la negociación. En 2019, se le notificó sobre el arribo a un acuerdo de solución amistosa que involucra una serie de compromisos por parte del gobierno, tales como la creación de una memoria histórica sobre los hechos ocurridos en ese período y la identificación de los restos óseos que se encuentran en el Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses, los cuales, según la Comisión de la Verdad, se presume corresponden a personas desaparecidas durante la dictadura.
Sin embargo, los integrantes de Cofadepa-HG alegan el incumplimiento de los acuerdos alcanzados.