El tercer robo a un banco estatal en un período de tres meses fue perpetrado ayer lunes en la sucursal de la Caja de Ahorros, ubicada en El Ingenio, Betania, cuando cinco personas, con armas de fuego, irrumpieron en el local y sustrajeron dos bolsas con dinero.
Reportes de la policía precisan que el robo se produjo a las 10:15 a.m., cuando un vehículo sedán color blanco se estaciona en la puerta de entrada del banco y cuatro hombres armados ingresan en su interior y amenazan a agentes de seguridad, empleados y clientes.
Una cámara de vigilancia captó el momento en que el auto llega al banco y los asaltantes entran a las instalaciones y varios transeúntes se alejan a toda prisa al percatarse del asalto.
De acuerdo con los reportes policiales, los asaltantes sustrajeron dos bolsas con dinero, aunque no se pudo establecer el monto que se llevaron los malhechores.
Pedro Escalona, subgerente de Control y Seguimiento de la Caja de Ahorros, detalló que durante el asalto no se registraron heridos y que de inmediato se activaron todas las alarmas y protocolos de seguridad.
Escalona detalló que la cámaras de vigilancia del banco grabaron todo el incidente y este material será puesto en manos de las autoridades para las respectivas investigaciones.
Dijo que tras el robo perpetrado el pasado 27 de septiembre en la sucursal de Villa Lucre “se redoblaron” los protocolos de seguridad.
El pasado 15 de agosto un grupo de delincuentes sustrajo $700 mil en la sucursal del Banco Nacional de Panamá (BNP) de Calidonia.
Por este caso el Ministerio Público imputó cargos a tres funcionarios del BNP y a dos particulares.
Según las investigaciones, dos de los funcionarios del banco detenidos desactivaron las alarmas y cámaras de seguridad de la sucursal, lo que facilitó el hurto..
También se detuvo a una mujer en cuyo teléfono registraron llamadas con el grupo que desactivó las alarmas. Además, su vehículo fue visto en el lugar el día en que se perpetró el hurto.
Otro de los detenidos es un electricista, quien se presume facilitó las herramientas para cortar los ductos del aire acondicionado por donde los delincuentes penetraron al banco.