Los municipios de Chame y San Carlos, en la provincia de Panamá Oeste, se preparan para recibir una gran cantidad de bañistas que anualmente acude a los balnearios y playas de este sector del Pacífico.
Las autoridades sostienen que el calor que azota al país será una de las causas para que más personas acudan a estos sitios de recreación del área oeste.
En el distrito de Chame la alcaldesa, Nieves Mayorga, indicó que el Sistema Nacional de Protección Civil instalará tres puestos de guardavidas en la playa La Boquilla, corregimiento de Gorgona.
En tanto, el Cuerpo de Bomberos hará lo propio en la playa Malibú, una vez se inicie el operativo de playa el primero de enero.
Mayorga recordó que para esta temporada seca se mantendrá la prohibición del ingreso de buses de paseo, así como de bebidas alcohólicas a ríos y playas de este distrito.
Durante la temporada de paseos la alcaldía limitará la venta de cerveza dentro de las playas a siete cajas por día, a cada vendedor autorizado.
Igualmente, se estableció en tres el número de permisos para vendedores de alimentos por cada acceso a las playas, mientras que los locales que allí operan deberán tener el visto bueno del Ministerio de Salud.
Mientras, en el distrito de San Carlos, el alcalde Víctor López reiteró su preocupación debido a la falta desde hace dos años de una estación de policía, lo que en su opinión dificultará el poder brindar la debida seguridad que esperan los bañistas.
Sumado a ello, dijo que en este distrito, que pertenece a la zona cuatro de desarrollo turístico, no existen agentes de la Policía de Turismo que puedan colaborar con los extranjeros que visiten estos lugares.
En este distrito las juntas comunales se encargan de la administración de las playas, siendo las que otorgan los permisos para la venta de alimentos y refrescos, además del cobro de la cuota por ingreso.