Aunque la legislación panameña prohíbe que los comerciantes acuerden fijar un mismo precio a un producto, Poulett Morales –que logró obtener contratos y órdenes de compra por más de 10 millones de dólares en tres años durante el anterior gobierno– reveló que se puso de acuerdo con otras dos empresas para vender a un mismo precio mochilas al gobierno.
Morales afirmó que durante una licitación para la compra y distribución de las mochilas “nosotros [las empresas] nos tuvimos que poner de acuerdo en un precio, porque el Ministerio de Educación (Meduca) o el Programa de Ayuda Nacional (PAN) no se podían gastar en que a uno le pagaría $7.50 y a otro $7.25. Tiene que ser un contrato general” [sic].
Lo revelado por la empresaria en una entrevista en el noticiero Telemetro Reporta contraviene disposiciones del Código Penal y de la Ley 45 de 2007, sobre Protección al Consumidor y Defensa de la Competencia, opinaron abogados, sin perjuicio de sanciones administrativas.
Las sociedades que vendieron mochilas de forma directa al Gobierno en 2011 –a través del Ministerio de Educación– junto con la de Morales –APM Supplies– fueron Hialing Corporation y Unitel Trader, creadas en agosto de 2009 y 2010, respectivamente.Hialing Corporation también vendió una cuantiosa cantidad de granos con sobreprecios al PAN, razón por la cual su antiguo director, Rafael Guardia, enfrenta cargos de corrupción.
Las tres sociedades –incluida la de Morales– acordaron un precio de $7.50 por mochila. Morales obtuvo $2.1 millones por vender 288 mil mochilas y $1.8 millón por su distribución, esta última a razón de $6.35 por cada entrega de mochila.Aseguró que vio en las mochilas un nuevo negocio, por lo que “se me ocurrió ofrecerla al Gobierno para que quede bien”.
‘LABOR SOCIAL’
Al responder si las sociedades eran de reciente creación al momento de obtener los contratos, afirmó: “Claro; una sociedad que le vende al Gobierno no puede ser igual a una que le vende a particulares... Sí, es la primera vez que le vendo al Gobierno y si este Gobierno me lo permite, también le vendo”.
Pero no fue lo único que admitió. También aseguró que la entonces ministra de Educación, Lucy Molinar, la había llamado para ofrecerle el contrato de las mochilas por $3.9 millones.
“Al final del camino, yo vi esto [la venta y entrega de las mochilas] como una labor social”, aseveró Morales.Este medio intentó obtener la versión de Molinar, pero no respondió las llamadas telefónicas ni mensajes dejados en su celular.Otra de las sociedades de Morales es Comercializadora Galbedusa Panamá, que obtuvo contratos millonarios en el PAN para la entrega de mochilas.
Durante la entrevista televisiva, Morales dijo que ella es una comerciante “visionaria”, y la única dueña de las sociedades que obtuvieron los contratos. Pero en las juntas directivas de APM Supplies y Comercializadora Galbedusa Panamá –que ganaron millones de dólares– no aparece el nombre de esta visionaria comerciante, sino los de empleados que trabajan para su tienda de modas DHD.
CONTRADICCIONES
Varias fueron las contradicciones de Morales en la entrevista. Por ejemplo, dijo que el anticipo que le entregó el Meduca por $500 mil había sido en 2012. “En el periódico La Prensa me acusan de que yo recibí un adelanto de $500 mil. Yo no recibí un adelanto en noviembre, sino en febrero de 2012”, aseguró Morales.
El adelanto del medio millón de dólares que recibió del Meduca fue entregado en la vigencia fiscal de 2011, según se desprende de una nota enviada por Molinar al entonces ministro de la Presidencia, Demetrio Papadimitriu (ver facsímil).
En nota fechada en septiembre de 2011, Molinar solicitó la autorización para contratar a tres empresas a fin de comprar y distribuir las mochilas, las cuales recibirían el anticipo mencionado y el resto del dinero se entregaría en 2012.
La Prensa intentó obtener la versión del comerciante coclesano Carlos Araúz, a quien se vinculó con la sociedad Unitel Trader, que obtuvo contratos millonarios con el PAN, pero no respondió los mensajes.
La otra empresa que obtuvo los contratos fue Hialing Corporation, que actualmente es objeto de una investigación en la Fiscalía Segunda Anticorrupción por contratos obtenidos por $8 millones en el PAN.
Según declaraciones del exdirector del PAN Rafael Guardia, esta sociedad está vinculada a Mario Martinelli, hermano del entonces presidente, y a Roberto Brin, empleado de Martinelli, primo de la esposa del exmandatario, Marta Linares.
Brin en su momento indicó a este medio que no es dueño o accionista de Hialing Corporation.
EL IMPERIO MORALES
Morales asegura que sus vínculos comerciales con el entonces presidente Ricardo Martinelli no la ayudaron a obtener contratos ni tampoco fueron el motivo para inscribirse en Cambio Democrático, que preside Martinelli. Aunque dijo que fue el propio exmandatario y su entonces director del PAN, Giacomo Tamburrelli, quienes aprobaron la compra de las mochilas que ella ofreció.
“Tamburrelli vio las muestras, le gustaron, le encantaron, y se la ofrecimos al Presidente y le encantaron y le gustaron”, afirmó.
Durante la entrevista, Morales, con voz quebrada y lágrimas en los ojos, dijo que “yo tengo un imperio, un imperio creado por mí...”.
Para el excontralor Alvin Weeden, la comerciante confesó públicamente varios delitos e indicó que las autoridades ya deben investigar. Consideró que se confesaron los delitos de tráfico de influencia y monopolio penados por nuestra legislación. “Se violentó el patrimonio público, mediante la distribución de las mochilas con altos montos”, resaltó.
Ayer, en horas de la tarde, el Ministerio de Comercio e Industrias realizó una inspección ocular en la tienda de Morales para verificar su aviso de operación. Y es que desde su boutique, despachó mochilas, electrodomésticos varios y hasta alquiló equipo rodante al PAN.
EDIFICIO
Aunque empresarios en bienes raíces opinan que el edificio de Morales vale unos $8 millones, de acuerdo a su ubicación y precios del mercado, la comerciante dice que el precio es inferior.
Morales construye un edificio de cuatro pisos en Marbella. Ella aseguró que tiene un costo de $2.5 millones, incluyendo el valor del terreno. El dinero –dijo– lo obtuvo por financiamiento bancario y la hipoteca de su casa de playa.
Una revisión en el Registro Público revela que la casa de playa, finca 44883, de Morales fue adquirida en 2010, y en 2013 realizó una segunda hipoteca del bien por $464 mil con un plazo de cinco años renovable, más dos años adicional.
Cuando se le cuestionó en la entrevista por qué no le había vendido antes a otros gobiernos, Morales respondió que “cuando tenía 28 años no podía ir a un banco a pedir un préstamo, eso no funciona así”. Sin embargo, reveló que en 2005 –cuando tenía 30 años– compró un apartamento por $150 mil a Martinelli.
La próxima semana, Morales deberá comparecer ante la Fiscalía Segunda Anticorrupción por la venta de mochilas al Gobierno.
