El interés de la Asamblea Nacional en darle en créditos fiscales a aquellos empresarios entre el 60% y el 100% de lo invertido en inversiones turísticas fuera de la ciudad de Panamá, vuelve a estar sobre la mesa, luego que los diputados aprobaron por insistencia el proyecto de ley 888.
Dicho proyecto de ley no busca en ningún momento encontrar fuentes alternativas, que compensen aquellos fondos que el Estado dejaría de recibir al dar estos beneficios a los empresarios. Según cálculos, serían aproximadamente 2 mil 900 millones de dólares por el simple hecho de otorgarles un beneficio fiscal a los empresarios que cumplan con los requerimientos mencionados en la ley.
Esta aprobación por insistencia de los comúnmente conocidos como incentivos fiscales al turismo, volvió a reintroducirse en el debate en la Asamblea Nacional, primero en la bancada del PRD, a través del diputado Melchor Herrera, tras la objeción del presidente Laurentino Cortizo, a la ley, al señalar haber encontrado “razones de inconveniencia para objetarla”.
Se aprueba un proyecto de ley que tiene opiniones contrarias tanto del Ministerio de Comercio e Industrias, del de Economía y Finanzas y de la Superintendencia del Mercado de Valores, además de tener dos demandas por inconstitucionalidad en la Corte Suprema de Justicia, que le corresponde ahora tomar una decisión sobre este tema, la cual no tiene una fecha límite para fallar.