El indultado expresidente peruano Alberto Fujimori experimentó una mejoría el domingo, pero continuará en la unidad de cuidados intermedios de una clínica local donde pasó su primera noche de Año Nuevo en libertad, informó su médico personal.
"Hay una respuesta positiva con relación a ayer (sábado)", dijo a periodistas el médico Alejandro Aguinaga afuera de la clínica peruano japonesa Centenario, donde Fujimori se encuentra internado desde el 23 de diciembre.
El médico evitó precisar a la prensa los males gástricos que aquejan a Fujimori, de 79 años, quien sufría un cuadro de hipotensión y de arritmia cardíaca cuando fue trasladado en ambulancia desde la prisión en la que estuvo recluido más de 10 años.
"Debe permanecer en reposo, con visitas restringidas", salvo para su familiares, acotó Aguinaga.
La junta médica encargada de Fujimori "había ordenado (el viernes) una endoscopía digestiva, y se encontraron tres cambios importantes que están ligados a los problemas estomacales que viene pasando", dijo Aguinaga.
El médico de cabecera del expresidente señaló que Fujimori seguirá en observación en la unidad de cuidados intermedios al menos otras 48 horas.
Esta área "sigue siendo una unidad crítica" en el hospital, resaltó.
El exmandatario, que gobernó Perú de 1990 a 2000, cumplía en una base policial de Lima una condena de 25 años por delitos de lesa humanidad, como autor mediato de la muerte de 25 personas en dos operaciones antiterroristas, en 1991 y 1992.
El presidente Pedro Pablo Kuczynski le otorgó un controversial indulto humanitario el 24 de diciembre, cuando ya estaba hospitalizado.
El indulto atizó la polarización que afecta a Perú desde hace más de dos décadas entre fujimoristas y antifujimoristas.
Miles de peruanos salieron a las calles a protestar contra la decisión del gobierno, mientras que se espera una nueva manifestación para el 11 de enero.
Una encuesta nacional de Ipsos mostró el sábado que 56% de los peruanos aprueba el indulto a Fujimori, contra un 40% que lo rechaza, mientras 4% no se pronuncia.