Angelina Jolie dice que el éxodo de millones de venezolanos al extranjero ha derivado en una "impactante" crisis migratoria en Suramérica que era "predecible y evitable".
La estrella de Hollywood y activista se encuentra en Perú para una visita de tres días como enviada especial de la agencia de la ONU para refugiados. Durante su visita, la actriz se reunió con refugiados venezolanos que viven en un albergue en la capital y también fue a un cruce fronterizo en el norte del país.
El martes, Jolie se reunió con el presidente peruano Martín Vizcarra para hablar sobre posibles soluciones a la crisis migratoria y maneras de asegurar el apoyo internacional. Tras las reuniones, agradeció a Perú por tomar medidas que están ayudando a los venezolanos a regularizar su situación inmigratoria en ese país, y exhortó a los gobiernos alrededor del mundo a apoyar procedimientos que ayuden a refugiados a solicitar asilo.
“Ninguno de los venezolanos a los que conocí quiere beneficencia”, dijo Jolie. “Ellos quieren una oportunidad para ayudarse a sí mismos”.
Más de 1,9 millones de venezolanos han abandonado su país desde el 2015, según la ONU, y unos 400.000 ahora viven en Perú. El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) ha calificado la situación como el mayor desplazamiento humano de los últimos años en Latinoamérica.
Sin embargo, el gobierno de Venezuela ha negado que haya una crisis migratoria y ha dicho que sus enemigos exageran la situación con el fin de justificar una invasión a Venezuela.
La Enviada Especial de #ACNUR Angelina Jolie se reunió con la hermana Sofía, quien abrió un comedor para #refugiados y migrantes venezolanos en #Tumbes, Perú. La solidaridad de la gente a menudo marca la diferencia. https://t.co/FPBL91tKIa Foto: S. Escobar-Jaramillo. pic.twitter.com/phKg3bjwue
El lunes, el jefe del Partido Socialista Diosdado Cabello se burló de la visita de Jolie a Perú al escribir en Twitter que se trataba de un simple show que “los medios de la derecha” están usando para ignorar una caravana de unos 5.000 migrantes que salieron de Honduras la semana pasada hacia Estados Unidos.