El presidente de Costa Rica, Luis Guillermo Solís, advirtió este lunes 8 de mayo que sería "una tragedia" que las "fuerzas más radicales" se impongan en Venezuela y la arrastren hacia una guerra civil, al insistir en una salida "política" a la crisis.
"Ha habido una generalizada preocupación por el deterioro que experimenta la política venezolana y la violencia que se ha desatado en las calles y los muertos que desafortunadamente suman todos los días", señaló Solís durante un desayuno en Madrid, donde se encuentra de visita oficial.
"La única salida que puede uno esperar es de orden político", afirmó, ya que "sería una tragedia que se vaya a producir un autogolpe de Estado de una manera u otra y que las fuerzas más radicales logren imponerse y colocar a Venezuela en la antesala de (...) una guerra civil".
Venezuela ha sido escenario desde abril de protestas opositoras para exigir elecciones generales como solución a la aguda crisis política y económica del país, que han degenerado en disturbios y violencia, con un saldo hasta ahora de 36 muertos y centenares de heridos y detenidos.
"Hay que seguir apostando al diálogo" entre la oposición y el gobierno de Nicolás Maduro, dijo Solís, pero aclaró que ese mecanismo no puede tener lugar "con presos políticos, sin condiciones adecuadas para que el Congreso recupere la soberanía que le corresponde ni (...) en un clima de tensionamiento".
Solís lamentó que Venezuela haya iniciado su salida de la Organización de Estados Americanos (OEA), donde Costa Rica integró un grupo de países que convocó una cita de cancilleres para evaluar la crisis venezolana, lo que llevó al gobierno de Maduro a iniciar su retiro de la institución continental alegando injerencia.
El mandatario costarricense comenzó este lunes su primera visita oficial a España desde que accedió al poder hace tres años, dentro de la cual se reunirá con el jefe de gobierno español, Mariano Rajoy, y el rey Felipe VI, así como con empresarios.