El ministro de Transparencia de Brasil, Fabiano Silveira, renunció este lunes tras criticar la investigación del multimillonario fraude a Petrobras.
Silveira presentó su renuncia tras divulgarse un audio en el que criticaba la gran operación anticorrupción que hace meses que sacude a la élite política y empresarial del gigante sudamericano.
Hace una semana, el ministro de Planificación, Romero Jucá, dimitió de su cargo tras revelarse otra conversación en la que sugería el fin de las investigaciones.
En los audios divulgados por la televisión Globo en la noche del domingo, se escuchaba a Silveira conversando sobre la gran operación anticorrupción que destapó el fraude en Petrobras con el presidente del Senado, Renan Calheiros, y el expresidente de Transpetro, una subsidiaria de Petrobras, Sergio Machado, ambos investigados en la causa.
La grabación fue hecha en marzo cuando Silveira ocupaba un cargo en el Consejo Nacional de Justicia.
Silveira sostenía en esa conversación que la Fiscalía estaba "perdida" en el caso Petrobras y orientaba a Machado sobre cómo encarar su proceso.
Machado colabora ahora con la Justicia y era igualmente el interlocutor de Romero Jucá en la conversación que derivó en su renuncia de la cartera estratégica de Planificación la semana pasada.
En su carta de dimisión, Silveira dijo que nunca imaginó "ser objeto de especulaciones tan insólitas".
"Fueron comentarios genéricos y simple opinión, amplificados por el clima de exasperación política que todos testimoniamos. No sabía de la presencia de Sergio Machado. No fui llamado para una reunión. El contexto era de informalidad basado en las declaraciones de quien se decía a todo instante inocente", se lee en un trecho de la carta reproducida por la prensa local.
Este lunes, funcionarios de ese ministerio creado por el presidente interino Michel Temer para luchar contra la corrupción realizaron protestas en Brasilia para reclamar la salida de Silveira. A la petición se unió, además, la ONG Transparencia Internacional.
Temer, quien según la prensa local había decidido mantener al ministro en el cargo, asumió el poder el 12 mayo, después de que el Senado suspendiera a la presidenta Dilma Rousseff para realizarle un juicio político por maquillaje de las cuentas públicas
