El agente de policía blanco que disparó a un adolescente negro de Chicago 16 veces fue acusado de asesinato y encarcelado al tiempo que la ciudad difundió el video donde se podía ver la balacera. Con todo, horas después los manifestantes parecían respetar las peticiones de calma.
La pregunta ahora es si esas medidas serán suficientes para abordar el resentimiento latente porque las autoridades se hayan demorado más de un año en emitir las imagines y acusar al agente, que vació un cargador entero sobre el adolescente incluso después de que hubiese caído al suelo.
Autoridades de la ciudad y líderes comunitarios se han preparado para la difusión del video de la cámara del tablero de un auto policiaco, temiendo el tipo de disturbios que ocurrieron en ciudades como Baltimore y Ferguson, Missouri, luego de que jóvenes de raza negra fueron asesinados por policías o murieron mientras estaban bajo custodia.
Un juez ordenó que la grabación se hiciera pública antes del miércoles. Momentos antes de que se difundiera el video, el alcalde y el jefe de policía hicieron un llamado a la calma.
El alcalde de Chicago, Rahm Emanuel, dijo que los residentes tienen “que tomar una importante decisión sobre nuestra ciudad y nosotros mismos y avanzar”. Se refirió al incidente como un potencial “momento de entendimiento y aprendizaje”.
Se espera que grupos de protesta organicen más manifestaciones en los próximos días, incluyendo una prevista para el miércoles en el ayuntamiento y otra que pretende cortar la avenida Michigan el viernes, un día que tradicionalmente se dedica a compras navideñas.
La porción relevante del video dura menos de 40 segundos y no tiene audio.
Laquan McDonald, de 17 años, aparece en una calle de cuatro carriles, en la que hay varios vehículos de la policía en medio del camino.
Mientras corre por la calle, parece subirse los pantalones y luego desacelera a una caminata veloz, alejándose de los policías que salen de uno de los autos con las armas desenfundadas. Casi de inmediato, uno de ellos parece disparar a corta distancia. McDonald gira y cae al suelo. El segundo policía de manera simultánea baja su arma.

