Con barricadas incendiarias en varios puntos de Santiago arrancó este martes un llamado a paro general convocado por un centenar de organizaciones sociales para presionar al gobierno de Sebastián Piñera para que profundice en las reformas sociales.
Las fogatas impedían el paso de vehículos en algunos accesos a Santiago, donde el transporte público operaba con relativa normalidad, tanto en el tránsito de autobuses como en el ferrocarril metropolitano.
Los vuelos en el aeropuerto de Santiago operaban con normalidad a primera hora de la mañana.
"Aeropuerto funcionando normalmente. Aerolíneas con operaciones regulares y en caso de cancelaciones, normalmente en estas jornadas no superan el 3% y ocurren todos los días por distintas razones", aseguró en un mensaje la concesionaria del aeropuerto.
En la autopista del Sol −que conecta a Santiago con el puerto de San Antonio y otras localidades agrícolas de la periferia de la ciudad−, grandes barricadas impedían el paso de vehículos en ambos sentidos.
Medios locales reportaron, además, otras fogatas en al menos 10 puntos de la cuidad.
El llamado a huelga general se produce a más de tres semanas de que estallaran las primeras protestas sociales, con ataques a la mitad de las estaciones del metro de Santiago, saqueos a tiendas y supermercados, y multitudinarias manifestaciones callejeras.
"Llamamos a paralizar totalmente las faenas productivas y puestos de trabajo", afirma una convocatoria de la llamada "Mesa Social", que reúne a más de un centenar de organizaciones sociales, entre ellas la Asociación Nacional de Empleados Fiscales (Anef), el Colegio de Profesores, trabajadores de la salud pública, empleados portuarios y de los aeropuertos.
La Confederación Nacional del Cobre, que agrupa a trabajadores tercerizados de la minería, también se unió al llamado.