Colombia y Estados Unidos rechazaron cualquier participación en el intento de asesinato del que el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, dijo haber sido blanco el sábado en Caracas, un acto denunciado por aliados como Cuba e Irán.
Maduro, que aseguró que el ataque se llevó a cabo con drones cargados de explosivos, responsabilizó de los hechos, ocurridos durante una parada militar, a la "ultraderecha", como se refiere a la oposición, y al presidente saliente colombiano, Juan Manuel Santos.
"No tengo duda que el nombre de Juan Manuel Santos está tras este atentado", dijo Maduro en una alocución transmitida en cadena de radio y televisión.
El gobierno de Colombia rechazó "enfáticamente" las acusaciones de Caracas, considerando que "resultan absurdos y carecen de todo fundamento".
"Ya es costumbre que el mandatario venezolano culpe permanentemente a Colombia de cualquier tipo de situación. Exigimos respeto por el presidente Juan Manuel Santos", dijo la cancillería colombiana en un comunicado.
Santos entregará el poder el martes al derechista Iván Duque, quien tacha a Maduro de "dictador".
Washington negó estar involucrado en lo ocurrido en Caracas.
"Puedo afirmar categóricamente que no hubo absolutamente ninguna participación del gobierno estadounidense en lo sucedido allí", dijo este domingo el consejero de Seguridad Nacional de Donald Trump, John Bolton, en la cadena Fox.