Cuba fustigó al "imperialismo" y cuestionó las exigencias de cambio hechas por Estados Unidos al rendir tributo este domingo 8 de octubre a Ernesto Che Guevara a medio siglo de su muerte en Bolivia, recordando gestas y frases del famoso guerrillero.
Presente en medio de una multitud de unas 70 mil personas reunidas para la ocasión en Santa Clara (centro), el presidente Raúl Castro dejó el honor de pronunciar el discurso central del acto a su vicepresidente Miguel Díaz-Canel.
"Reafirmamos que Cuba no realizará concesiones inherentes a su soberanía e independencia y no negociará sus principios ni aceptará condicionamientos", dijo ante la multitud Díaz-Canel, de 57 años y probable sucesor de Castro en la presidencia de Cuba en febrero próximo.
El vicepresidente también recordó una advertencia de Guevara: "No se puede confiar en el imperialismo, menos, ni tantito así, nada", dijo. Sus dichos llegaron luego de que el viernes el presidente estadounidense Donald Trump dijera que no levantará "sanciones contra el régimen de Cuba hasta que haya total libertad política para el pueblo cubano", y en medio de crecientes tensiones entre La Habana y Washington.
"Los cambios necesarios en Cuba los está decidiendo soberanamente el pueblo cubano", replicó Díaz-Canel.
El homenaje se realizó en Santa Clara, 300 km al este de La Habana, pues esta ciudad adoptó al rebelde argentino-cubano tras la batalla que capitaneó allí Guevara en diciembre de 1958, marcando el derrumbe de la tiranía de Fulgencio Batista y el triunfo de Fidel Castro el 1 de enero de 1959.
Artistas declamaron poemas y entonaron canciones en la ceremonia de apenas una hora de duración. Es el primer homenaje al Che en Cuba sin Fidel Castro, su jefe y amigo, quien murió en noviembre pasado y que en 1967 instituyó el 8 de octubre como el día del "Guerrillero Heroico" y convirtió al Che en símbolo del "hombre nuevo", que ambos intentaron forjar.
Una comitiva oficial cubana partió también el sábado hacia Bolivia, donde se realizará una serie de actos conmemorativos, con el apoyo y participación del presidente Evo Morales. "Ahora estamos enfrentando también las intenciones del señor presidente de los Estados Unidos (..) y el Che nos dio la enseñanza desde que comenzó este proceso revolucionario en México: al imperialismo le decimos ni un tantito así", dijo a la AFP Félix Rodríguez, un exguerrillero de la Sierra Maestra.
Entre los asistentes también estaba Luis Monteagudo, un mestizo delgado de 79 años que combatió a las órdenes de Guevara en el Congo. Con una camiseta blanca y una imagen del Che en rojo, un emocionado Monteagudo aseguró que para él "el Che sigue vivo por su vida, por su obra y por su ejemplo".
David Metral, un argentino profesor de historia en Córdoba, manifestó su emoción al concluir el acto y señaló que "en la medida que vamos tomando conciencia del valor de su lucha (del Che) y del sentido de su lucha, se va multiplicando su ejemplo y su legado en todo el mundo".
Varios turistas asistieron a la ceremonia, en momentos en que la isla es cuestionada como destino seguro, debido a las denuncias de Washington sobre lesiones sufridas por una veintena de sus diplomáticos en La Habana por "ataques" contra su salud.
Nacido el 14 de junio de 1928 en Rosario, Argentina, Guevara fue un inquieto joven de familia burguesa que estudió medicina y protagonizó un histórico viaje en moto por Sudamérica con su amigo Alberto Granados. Era fotógrafo ambulante en México cuando conoció a Fidel Castro en 1956, que preparaba la expedición del Granma en la cual se enroló.