La Justicia brasileña emitió hoy una nueva orden de prisión preventiva contra el presidente de la constructora Odebrecht, una de las más importantes del país, y envuelta en el colosal escándalo de corrupción de la petrolera estatal Petrobras.
El juez Sergio Moro, de la sala penal federal de Curitiba y responsable por las investigaciones del caso de corrupción en Petrobras, justificó el nuevo pedido de prisión contra Marcelo Odebrecht y otros cuatro dirigentes de la compañía por el surgimiento de "nuevos hechos" incriminadores.
"En el curso de las investigaciones surgieron elementos que reforzaron la relación entre Odebrecht y el pago de sobornos en el exterior", aclaró el juez en su decisión.
Esta semana, el Ministerio Público de Suiza incluyó a Odebrecht en las investigaciones que la Fiscalía lleva a cabo para esclarecer la corrupción en Petrobras, mayor empresa de Brasil y responsable por una parte significativa del PIB del país.
La Fiscalía suiza confirmó la existencia de indicios de pago de sobornos por parte de Odebrecht a directivos de la compañía y solicitó a Brasil la cooperación en la investigación.
Marcelo Odebrecht se encuentra preso desde el pasado 19 de junio junto con otros cuatro dirigentes de la firma y de Otávio Azevedo, presidente de Andrade Gutiérrez, otra de las importantes constructoras del país.
El juez Moro declaró que Odebrecht "tiene condiciones de interferir" en la investigación, a través de la eliminación de pruebas, la presión de testigos o la interferencia política, al tiempo que destacó la posibilidad de fuga al exterior de los investigados.
Odebrecht, al igual que otra veintena de compañías del país, es investigada por su supuesta participación en una vasta red de corrupción enquistada en Petrobras, que durante la última década se apropió ilegalmente de unos 2 mil millones de dólares, según cálculos de la propia empresa.
De acuerdo con la Policía, las firmas obtenían contratos amañados con Petrobras, inflaban los valores, y las diferencias eran repartidas entre directores de la estatal y partidos políticos que amparaban las corruptelas.
Por este mismo caso, las autoridades también investigan a medio centenar de políticos, que en su mayoría pertenecen a la coalición que respalda al gobierno de la presidenta Dilma Rousseff.