El secretario ejecutivo de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), Jesús Torrealba, aseguró que el presidente Nicolás Maduro, finalmente, se dio cuenta de que la estrategia de retrasar el referendo revocatorio que solicitó la oposición no tiene solo el objetivo de sabotear el derecho del pueblo venezolano a evaluarlo, sino que busca sacarlo del poder, culpándolo por toda la crisis.
“El plan de su entorno es salir [de él] y quedarse ellos en el poder (...) por eso [él] está buscando mecanismos que precipiten una crisis mayor”, dijo a NTN24, al analizar el anuncio de Maduro de que emitirá un nuevo decreto de estado de excepción.
Torrealba advirtió que, de ser emitido, el decreto tendría que ser enviado a la Asamblea Nacional para su aprobación.
EXIGENCIAS
El oficialismo y la oposición se manifestaron ayer en Caracas luego de que el presidente venezolano, Nicolás Maduro, anunció que dictó un nuevo decreto de Estado de Excepción y Emergencia Económica, en medio de exigencias de la oposición de que se acelere el proceso de verificación de firmas para el referendo revocatorio.
“Queremos quitarnos este yugo de encima para poder vivir bien”, expresó el opositor Simón Moreno a AP. “Estoy pasando por los peores momentos, pero no me preocupo por mí, me preocupo por mis hijos, que van a conseguir un país destrozado”, lamentó.
La manifestación opositora fue pacífica. Exigieron al Consejo Nacional Electoral que se pronuncie sobre la validez o no de 1.8 millones de firmas entregadas en abril.
El referendo pretende acortar el mandato de Maduro, que vence en 2018.
“Queremos validar las firmas... Ni se está cumpliendo la Constitución ni el reglamento”, dijo el líder opositor Henrique Capriles.
La oposición convocó a una nueva marcha el próximo miércoles hasta el CNE.
El analista político Carlos Ramírez López declaró a NTN24 ayer que el decreto tendría que ser sometido al escrutinio de la Asamblea Nacional para ser aprobado.
El segundo vicepresidente de la Asamblea, Simón Calzadilla, advirtió que “Venezuela está a la expectativa de que un estallido social arrase con la institucionalidad del país”.
En la misma línea se pronunció el secretario ejecutivo de la Mesa de la Unidad Democrática, Jesús Torrealba, quien cree que el gobierno está acorralado por cuestiones como la economía y el descontento popular por la falta de alimentos y medicinas, electricidad y agua.
En tanto, durante la manifestación oficialista se pidió “respaldar la activación del Motor de Economía Comunal” o aquellas medidas para rescatar al país de la profunda crisis económica.
Maduro llegó a la concentración, en donde anunció que el próximo sábado habrá ejercicios militares. También aseguró que el Estado tomará control de las empresas que están paralizadas –entre las que está Polar, que da empleo a unas 18 mil personas– y encarcelará a sus dueños.
El constitucionalista José Vicente Haro expresó que el decreto reemplaza al Decreto de Emergencia Económica dictado en enero pasado y cuya prórroga de 60 días venció el pasado miércoles.
En declaraciones al diario El Universal, Haro indicó: “El presidente ha optado por otra vía... un nuevo decreto, que es mucho más amplio que el anterior”. Lo que busca “en principio es restringir garantías (…) que tienen que ver con el orden interno, con el ejercicio de los derechos civiles y políticos”, remarcó.