Pequeñas protestas se registraron este sábado en Caracas por la muerte del expolicía Óscar Pérez y seis de sus hombres a manos de las autoridades, mientras se desconoce el destino del cuerpo del piloto que se rebeló contra el gobierno de Nicolás Maduro.
Un grupo de manifestantes se mantenía concentrado entrada la noche en la calle de acceso a la morgue de Bello Monte, en el sureste de la capital venezolana, exigiendo la entrega del cadáver de Pérez a un familiar.
Policías y militares, con equipos antimotines, cerraban el paso desde temprano.
"Lo quiero conmigo para enterrarlo donde yo quiera", dijo en un video divulgado en redes sociales Aminta Pérez, madre del expolicía que se alzó contra Maduro entre protestas opositoras que dejaron 125 muertos entre abril y julio del año pasado.
#ÚltimaHora Madre de #OscarPérez habla EN video sobre lo que está ocurriendo en la #Morgue en #Venezuela con el cuerpo de su hijo. Video cortesía de @danavivasvzla pic.twitter.com/zbvsw7cLq0
Vive en México junto con la viuda de Pérez y los tres hijos de la pareja. Aura Pérez, tía del exagente, gestiona sin éxito en Venezuela la cesión del cuerpo.
A principios de la tarde hubo breves choques en los alrededores de la morgue entre manifestantes y funcionarios de seguridad.
Dos de los aliados de Pérez abatidos, José Pimentel y Abraham Agostini, fueron enterrados en la mañana -sin ser velados- bajo custodia militar y policial. Los otros cuatro fueron trasladados a las ciudades de Maracaibo (noroeste) y San Cristóbal (oeste).
Unas 300 personas acudieron al Cementerio del Este, principal camposanto de Caracas, donde gritaron consignas ante militares de la Guardia Nacional que les impedían ir hacia las parcelas donde eran sepultados Pimentel y Agostini. "íCarniceros!", clamaban.
#VIDEO El mensaje de un joven que se acercó a la Morgue de Bello Monte donde reclaman el cuerpo de Óscar Pérez, a cinco días de la masacre de El Junquito https://t.co/dgFbRwcGdA pic.twitter.com/uFspb9Yuis
"Vengo a rendir honores a estas personas vilmente asesinadas", declaró a la AFP Mónica Santamaría, docente de 54 años, al llegar con una pancarta con los nombres de Pérez y sus compañeros escritos sobre una cruz.
Manifestantes también se concentraron en la zona de Altamira, un bastión opositor en el este de la ciudad.
El pasado lunes, los sublevados -acusados de "terroristas" por el gobierno- murieron durante una operación para su captura. Todos fallecieron por disparos en la cabeza, según actas de defunción publicadas por la prensa, y organizaciones de derechos humanos alertan de posibles "ejecuciones extrajudiciales".
Tras más de cinco horas de bloqueo y luego de que Pimentel y Agostini fueran enterrados ante un puñado de familiares, los militares se retiraron, dejando pasar a la multitud. "íCalle, calle!", gritaba el grupo, llamando a protestar.
Sus cuerpos fueron trasladados en la madrugada, sin autorización, denuncian familiares y políticos opositores. "Ni siquiera sus creencias religiosas se les han respetado", declaró a la AFP la diputada Delsa Solórzano, quien preside una comisión parlamentaria que investiga el caso.
Pérez fue declarado como "el criminal más buscado" de Venezuela tras atacar el 27 de junio del año pasado con granadas y armas de fuego edificios gubernamentales desde un helicóptero. El 18 de diciembre su grupo robó fusiles y municiones de un cuartel.