El reverendo Patrick Peyton, un sacerdote católico nacido en Irlanda que predicó a millones de personas utilizando la radio, la televisión y el cine y acuñó la frase “la familia que reza unida permanece unida”, estaba el martes un paso más cerca de ser santificado.
El papa Francisco aprobó un decreto afirmando que Peyton tuvo una vida de heroica virtud cristiana, según indicó el Vaticano. Ahora la Iglesia debe certificar un milagro atribuido a su intercesión para poder beatificarlo. Hace falta un segundo milagro para convertirlo en santo.
Peyton, conocido como “el sacerdote del rosario” por su costumbre de rezar con las cuentas de un rosario, organizó plegarias masivas en todo el mundo y recurrió a estrellas de Hollywood como Bing Crosby y Lucille Ball para difundir su mensaje. Murió en 1992.
