El nuevo ministro brasileño de Justicia garantizó “apoyo total” a la investigación sobre el megafraude a la estatal Petrobras, sin importar que algunos de los miembros del gobierno interino estén señalados en el caso.
“No existe la mínima posibilidad de interferencia. Quien conoce mi historia, desde fiscal, sabe que el combate a la corrupción es la cosa más importante no solo hoy, sino desde siempre en el país”, aseguró el ministro Alexandre de Moraes en una entrevista con el canal Globo, transmitida el viernes de noche.
Al menos tres ministros del gobierno interino de Michel Temer, que asumió el jueves después de que Rousseff fue separada del cargo para enfrentar un juicio político, son investigados por el escándalo Petrobras, el mayor caso de corrupción de la historia de Brasil.
Entre ellos destaca Romero Jucá, ministro de Planificación y presidente del partido de Temer, el centrista PMDB.
“La ley debe ser aplicada igual para todos, sin nombre, sin filiación y sin partido. La ley es para todos”, subrayó.
El ministro aseguró que dará “apoyo total” a la operación policial Lava Jato (lavadero de autos), que investiga este caso que le costó a la estatal más de 2 mil millones de dólares en pérdidas y que ha manchado a buena parte de la élite del poder en Brasilia.
“En la práctica es dejar [la operación] como viene ocurriendo, que la Policía Federal trabaje como viene trabajando, que el Ministerio Público continúe trabajando en conjunto con la Policía Federal”, indicó el responsable, que ofreció “más recursos si hubiera necesidad” para "acelerar las investigaciones" y "revelar todas las ramificaciones de la Lava Jato".
De Moraes fue juramentado el jueves. Antes fue secretario de Seguridad en el estado de Sao Paulo y responsable de una policía acusada de constantes abusos a los derechos humanos, con escuadrones de la muerte para enfrentar pandillas criminales.