Los Guardianes de la Revolución, el ejército de élite iraní, acusaron este miércoles 7 de junio a Estados Unidos y Arabia Saudita de estar “implicados” en los ataques de Teherán, que causaron 12 muertos y al menos 46 heridos.
“Esta acción terrorista tras la reunión del presidente de Estados Unidos con el jefe de uno de los gobiernos reaccionarios de la región, que siempre ha apoyado a los terroristas, tiene graves implicaciones, y la reivindicación de Dáesh (acrónimo árabe de Estado Islámico) demuestra que están implicados”, afirmó un comunicado publicado por la agencia de prensa oficial Isna.
Por su parte, Mohamad Hosein Nejat, jefe adjunto de los servicios de inteligencia de los Guardianes de la Revolución, también acusó a Arabia Saudita y Estados Unidos, afirmando que estos dos países habían “ordenado a sus marionetas” perpetrar estos atentados, informó la agencia Fars.
Los Guardianes de la Revolución afirmaron que se vengarán. “Los Guardianes de la Revolución siempre han probado que nunca dejan sin venganza la sangre de inocentes derramada”, afirma el comunicado del ejército de élite iraní.
El grupo yihadista Estado Islámico (EI) reivindicó en esta jornada sus primeros atentados en Teherán, donde hombres armados y kamikazes atacaron el Parlamento y el mausoleo del ayatolá Jomeini.
Estos atentados, perpetrados casi simultáneamente contra dos lugares altamente simbólicos, no tienen precedentes en la capital iraní.
Los ataques duraron varias horas y terminaron hacia media tarde. La policía informó que todos los atacantes habían sido abatidos alrededor de las 3:00 p.m. (10:30 GMT), unas 5 horas después del inicio del incidente.

