Honduras detectó un rebrote del insecto descortezador del pino, que entre 2014 y 2016 destruyó 511 mil de las 1.9 millones de hectáreas de coníferas del país, a causa de una sequía provocada por el cambio climático, informó este martes el gobierno.
El presidente Juan Orlando Hernández alertó que Honduras registra desde octubre un aumento en la temperatura que ha propiciado brotes del gorgojo, que causó un gran daño ambiental entre 2014 y principios de 2016.
Añadió que el país espera una sequía severa entre febrero y la primera quincena de mayo, peor que la del año pasado, la cual obligó a declarar emergencia alimentaria en el Pacífico sur para atender a decenas de familias que perdieron sus cultivos.
El director de Áreas Protegidas y Vida Silvestre del estatal Instituto de Conservación Forestal (ICF), Angel Matute, informó a la AFP que los brotes han sido detectados en los departamentos de Olancho, El Paraíso (este), Yoro (norte), Comayagua y Francisco Morazán (centro).
Matute destacó que según el Instituto German Watch, que monitorea los efectos del calentamiento global, Honduras ocupa el tercer lugar entre los países más afectados por el cambio climático, después de Birmania y Haití.
También indicó que, a fin de evitar una nueva catástrofe ambiental, el gobierno ha hecho alianza con el Colegio de Ingenieros Forestales, municipalidades y ONGs para identificar los brotes del insecto, conocido con el nombre científico de dendroctonus frontalis.
Matute calculó que 70% del área afectada se está regenerando de forma natural y las autoridades atienden el restante 30% a través de programas de reforestación.
Dijo que anualmente se pierden 57 mil hectáreas de pinos por los incendios forestales, la mayoría causados por mano criminal o por agricultores y ganaderos que usan métodos tradicionales en los cultivos.
