Millones de hondureños comenzaron a votar este domingo para escoger a sus autoridades para los próximos cuatro años, en un proceso marcado por la candidatura a la reelección del presidente Juan Orlando Hernández y los temores de la oposición a que ocurra un fraude.
Las 17 mil 500 mesas de votación abrieron poco después de las 07H00 locales (13H00 GMT) con grandes filas de personas abrigadas y con bufanda en una fresca mañana en la capital Tegucigalpa.
"Esperamos que sea una fiesta cívica", declaró el presidente del Tribunal Supremo Electoral (TSE), David Matamoros, al abrir la votación en el Instituto San Miguel, un colegio católico capitalino.
El tribunal prevé cerrar la votación a las 16H00 locales (22H00 GMT), aunque usualmente se extiende una hora más.
La elección también se celebra en siete ciudades de Estados Unidos con elevada concentración de migrantes hondureños, según el TSE.
Más de seis millones de hondureños están convocados para escoger a su próximo presidente de entre nueve candidatos, de los cuales tres aparecen con opciones de vencer.
Junto a Hernández, en el poder desde 2014, compiten por la presidencia el académico Luis Zelaya del Partido Liberal (PL, derecha) y el periodista Salvador Nasralla, de la izquierdista Alianza de Oposición contra la Dictadura.
El gobierno desplegó más de 35 mil efectivos policiales y militares en todo el país para garantizar la seguridad del proceso, según el ministro de Seguridad, Julián Pacheco.