Investigan a 12 guardaespaldas por asesinato del candidato presidencial colombiano Bernardo Jaramillo en 1990

Investigan a 12 guardaespaldas por asesinato del candidato presidencial colombiano Bernardo Jaramillo en 1990


Doce exagentes en Colombia integrantes del cuerpo de seguridad del candidato presidencial izquierdista Bernardo Jaramillo, asesinado en 1990, fueron vinculados a la investigación del homicidio, informó este miércoles la Fiscalía.

En el caso de Jaramillo, "se tomó la determinación de dar apertura formal a la investigación, ordenando la vinculación de ocho exmiembros del DAS (Departamento Administrativo de Seguridad) y cuatro de la Policía Nacional, quienes hacían parte del esquema de seguridad" del político, dijo a periodistas Augusto Cabana, director de la Unidad de Análisis y Contexto de la Fiscalía.

Para el momento de su muerte, ocurrida en el aeropuerto El Dorado de Bogotá, Jaramillo era candidato presidencial de la Unión Patriótica (UP), un partido de tendencia comunista creado tras un fallido proceso de paz con la guerrilla FARC en 1984 y que sufrió un proceso de exterminio.

Según las autoridades, unos 3 mil militantes de ese movimiento político fueron asesinados por paramilitares en connivencia con fuerzas estatales.

Precisamente Cabana dijo este miércoles que en el caso de Jaramillo, así como en el de otros miembros de la UP asesinados, "existen unos elementos comunes relacionados con los esquemas de seguridad, donde se advierte una probable infiltración de los esquemas que han llevado a considerar una probable participación" de algunos agentes directamente en los hechos.

Por la muerte de Jaramillo ya fueron condenados los jefes paramilitares Fidel y Carlos Castaño, fundadores de las extintas Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), de extrema derecha.

Semanas atrás, y en el marco de la aplicación del acuerdo de paz firmado en noviembre con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC, marxistas), el presidente Juan Manuel Santos dijo que su gobierno no permitirá que se "repitan tragedias" como la de la UP.

Santos se pronunció así ante el aumento del asesinato de activistas en 2016 (127, según la ONU) y por el miedo que tienen las FARC a que una vez dejen las armas y se reincorporen a la vida civil sus miembros sean asesinados como los de la UP.

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